Como ya informamos el pasado sábado, Alzira y su equipo más representativo, la UD Alzira, recibió un duro mazazo que golpeó también a prácticamente todo el estamento del fútbol nacional.
Nacho Barberá, jugador y capitán del equipo cadete de la UD Alzira, con tan solo 14 años, perdía la vida mientras jugaba un partido de fútbol en Ontinyent. De improviso, sin estar participando activamente en una jugada, se desplomó ante la sorpresa y conmoción de todos los presentes en el campo. Fue atendido de inmediato y trasladado a un hospital, pero no se pudo hacer nada por su vida. La muerte súbita volvía a cobrarse una nueva víctima en el deporte, en general, y en el fútbol en particular.
Nacho ha jugado en la UD Alzira durante toda su trayectoria deportiva, desde prebenjamines, su padre es miembro de la actual junta directiva del club y responsable del fútbol base de la entidad.
El pasado domingo, la muerte de Nacho Barberá consternó al mundo del fútbol. Desde Julen Lopetegui hasta la mayoría de clubs y organismos lamentaban públicamente la pérdida del joven futbolista. Valencia, Levante, Villarreal, Betis, Cádiz, Hércules… fueron numerosísimos los clubs de fútbol, profesionales y amateurs, que quisieron arropar a Nacho; uno de ellos, de manera muy especial, el Atlético de Madrid, del que “El Cholito”, como así apodaban a Nacho, era un incondicional. El equipo colchonero ha mandado una corona de flores, así como una camiseta firmada por los jugadores de la actual plantilla.
Ayer lunes, la UD Alzira pidió ayuda psicológica para los compañeros de Nacho Barberá, debido al mal estado anímico. Por su parte, el Ayuntamiento decretó un día de luto en el que ondearon a media asta las banderas del Consistorio.
Alzira llevó el brazalete del capitán Nacho
Hoy, a pesar del gélido día, su equipo y una ciudad compungida por el dolor han dado el último adiós a Nacho Barberá Expósito. Centenares de personas se han dado cita en el tanatorio y en la iglesia de Santa Catalina volcándose en muestras de cariño de todo tipo. Muchos de los asistentes llevaban en su brazo un brazalete rojo como el que llevaba el capitán Nacho.
En el sepelio, además de sus familiares, compañeros de colegio y equipo, amigos y conocidos cabe destacar una nutrida presencia del mundo del futbol; entre ellos, el primer equipo, la escuela de fútbol y directivos de la UD Alzira con su entrenador Fernando Gómez y presidente Juan Antonio Sanjuán. Así mismo, también acudieron, entre otros, José Gimenéz, director de captación del Valencia CF; Luis Vicente Mateo, director de la escuela de fútbol base del Valencia CF; Sergio Ventosa; Miguel Tendillo; Fernando Giner, presidente de la Asociación de Veteranos del Valencia CF; Sergio Gómez, jefe de captación del Levante UD; los expresidentes de la UD Alzira Pepe Bartolomé, Pepe Bosch y Javier Pérez; David Ortega, delegado en la Ribera del Comité Técnico de Árbitros de la Comunidad Valenciana; Eduardo Revert, delegado en la Ribera de la Federación Valenciana de Fútbol; Dani Ponz, exentrenador de la UD Alzira; Eliseu Gómez, presidente del COTIF; así como una representación de árbitros de fútbol, presidentes y directivos de equipos de la comarca.
Una terrible coincidencia
La muerte súbita se ha llevado a muchos jugadores, unos de fama reconocida como Dani Jarque y Antonio Puerta, pero también se lleva a los humildes, a los jugadores de equipos pequeños. Alzira ha contado en un año con la desgracia de perder a dos jugadores de fútbol: Ernesto Guerrero y Nacho Barberá.
Casualmente, hace exactamente un año, el 4 de febrero de 2017, Ernesto Guerrero, de 22 años, sufrió una parada cardíaca mientras jugaba al fútbol con unos amigos en la localidad vecina de Llaurí.
La ciudad y el fútbol local deben recordar de manera póstuma, para siempre, a estos dos jóvenes futbolistas. D.E.P.
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Petón y su homenaje a “El Cholito”
"Que hoy, mañana y cada vez se vea la sombra del mediocampista 'peleón'". D.E.P.