Argentina consigue el pase a la final del COTIF de l'Alcúdia al vencer a México por la mínima
Martes, 20 de agosto de 2013 | e6d.es
• Selecc. Nac. de Argentina, 1 - Selecc. Nac. de México, 0
Argentina – 1 – Batalla, 3 – Carreras (TA), 5 – Compagnucci, 7 – Di Franco (TA) (11 – Leszczuck m. 60 TA), 8 – Driussi (4 – Colman m. 45), 13 – Mammana, 14 – Martínez (TA), 15 – Moreyra (TA), 20 – Sánchez (TA), 22 – Tripichio y 16 - Vega (9 – Ferreyra m. 65)
Entrenador: Humberto Grondona.
México – 1 – González, 2 – Mártir, 3 – Arreola (TA), 4 – Rodrigo González (TA), 5 – Gutiérrez (TA), 6 – Flores (TA), 7 – Almeida, 8 – Ramírez, 9 – Ríos, 11 – Pineda (TA (20 – Martínez m. 53) y 18 – Lozano (10 - Sergio Rodríguez m. 36 – Pulido m. 59).
Entrenador: Mario Alberto Arteaga.
Argentina se clasificó para la final del XXX aniversario del Cotif tras derrotar en el duelo americano a México, en un partido que gozó de la intensidad propia de los derbis. El gol de Tomás Martínez en la primera parte fue suficiente para dar el pase a la albiceleste, que se encargó de romper el juego azteca en la segunda mitad para impedirles el empate. Argentina defenderá el título conseguido el año pasado.
El partido se inició con una escenificación perfecta de las características del fútbol del sud de América. Garra, intensidad, contundencia, fuerza y pegada. Los dos conjuntos buscaron el marco rival prácticamente sin atención a la elaboración de las jugadas, con juego directo que posibilitó llegadas de peligro desde el minuto uno. México tuvo más el balón, mientras Argentina esperó primero agazapada para salir con rápidos contragolpes. Cuando pudo enlazar medianamente, llegó el peligro. Primero avisó Di Franco con un disparo lejano que impacto por la parte exterior del palo. Un minuto después, sin embargo, una buena combinación en banda de Driussi y Martínez se convirtió en el tanto del último, con un potente chut que derritió las manos del cancerbero González.
El seleccionador azteca introdujo en el descanso a uno de sus hombres más importantes, Sergio Rodríguez en su intento de conectar la construcción del juego y la definición de cara a portería. Allí se mostró especialmente insistente Ríos, el potente delantero mexicano. Un jugador a tener en cuenta por su valía en el juego aéreo pero también por su rapidez, excelentes desmarques e incansable trabajo. Los centroamericanos aumentaron su posesión del balón pero tardaron a hacer daño. La alta intensidad y rivalidad del encuentro se visualizó alrededor del minuto sesenta con una tangana (sólo de insultos y algún empujón) que no llegó a mayores por la presencia de las fuerzas de seguridad.
México fue volcándose al ataque y a falta de diez minutos la presión era máxima, sin contar, eso sí, con ocasiones claras. Argentina, por su parte, supo jugar con el tempo del partido y aturó el ritmo mexicano con continuas interrupciones que le cargaron de tarjetas. Ante la falta de posibilidades, México colgó balones al área pero en dicha faceta estuvo imperioso Batalla.
Árbitro: Vicente Gil Coscolla, asistido en los laterales por Daniel Faenen Álvarez y Roberto González Álvarez. Muy bien.
Incidencias: Estadio Els Arcs. Más de cuatro mil personas.
COTIF
Carles Senso
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