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Únicamente tres vigilantes privados se encargaron de velar por la seguridad de una discomóvil celebrada durante las recientes fiestas locales de Carcaixent en las denominadas pistas de Feve. Además, unas imágenes que La sexta difundió el pasado viernes, demuestran una ausencia total de control, con menores tomando alcohol, saltando la valla para acceder a la pista e incluso con consumo de drogas a la vista de todos en un espacio público. El ayuntamiento señaló ayer que en estos actos se concentran en torno a unas dos mil personas en el interior de las pistas de Feve, aunque paralelamente se desarrolla un macrobotellón con centenares de jóvenes a las puertas del recinto, junto a las pistas de la estación. La ausencia de la Policía Local en el recinto es consecuencia del plan de ajuste en el que está sumido el ayuntamiento, que impide pagar horas extraordinarias a la plantilla, según señalaron varias fuentes municipales.
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