Carcaixent contacta con propietarios de campos abandonados para que los limpien

Un 40% de los terrenos han sido adecuados con esta campaña de concienciación que se está llevando a cabo para mantener el paisaje

Muchos municipios de la Ribera buscan soluciones para acabar con el abandono de campos en su término para evitar problemas de plagas pero también para que el paisaje agrícola tan característico de la zona no se pierda.
En Carcaixent, se ha optado por realizar una campaña de concienciación de la necesidad de limpiar los campos. Para ello, los técnicos de la concejalía de Agricultura han realizado un censo de terrenos abandonados y han contactado con los propietarios para impulsar su limpieza.
«Hemos visto buena voluntad por parte de la mayoría de propietarios y se ha conseguido que se limpien un 40% de los campos abandonados», ha explicado el técnico medioambiental, Carlos Burguet.
En total, ya se han desbrozado más de 1.300 hanegadas aunque también han destacado que el porcentaje de terrenos sin cuidar «no es alarmante» y se cifra en un 4% del total de cultivos de Carcaixent.
Aunque la ordenanza municipal contempla sanciones para este tipo de prácticas que pueden llegar hasta los 3.000 euros, en los casos más extremos, el Ayuntamiento ha decidido comenzar a requerir a los propietarios sin abrir expediente ya que muchos son pensionistas que no pueden trabajarlos.
En este sentido, el Consistorio de Carcaixent está realizando tareas de mediación entre los dueños de terrenos que no quieren seguir con la agricultura y las personas interesadas en cultivar tierras para conseguir ingresos.
«El objetivo es que no se abandonen los campos y que haya un relevo generacional. La crisis ha provocado que gente que trabajaba en la construcción opte por volver al campo como una salida ante las dificultades», ha explicado la concejala de Agricultura, Inmaculada Albelda.
Con el requerimiento a propietarios de terrenos, los técnicos han dado con un problema y es que el 7% de parcelas abandonadas se encuentra en investigación ya que se desconoce quien es el dueño debido a temas de herencias. Este hecho dificulta que se pueda instar a su limpieza o a la ejecución subsidiaria que propone la limpieza por parte del Ayuntamiento a cambio de que luego el gasto recaiga en el propietario.

Visado de la naranja
Otro de los problemas que sufre el campo valenciano es el de los robos de la producción. En este sentido se ha aumentado la vigilancia por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y se están poniendo medidas en las localidades agrícolas.
En el caso de Carcaixent, ha comenzado de forma voluntaria, la creación del visado de procedencia de productos. «Se trata de un documento pionero que mejora la guía conduce que ya funciona en otros municipios», han señalado desde la Concejalía de Agricultura.
Los propietarios de campos que cedan la recogida de naranjas a otras personas tienen que rellenar este documento en el Ayuntamiento quien lo «visa» para que tenga validez y no se pueda falsificar. Una de las novedades es que además de datos como la procedencia del productos, su destino o la cantidad, se especifica la caducidad del documento por lo que sólo se puede utilizar los días de recogida.
Aunque se puso en marcha para el final de la presente campaña, se están recogiendo las opiniones de los agricultores para valorar si se impone con carácter obligatorio para la próxima.
Carcaixent es conocida como 'el bressol de la taronja' y por ello son muchos los huertos históricos que conserva. Uno de ellos es el paraje natural Hort de Soriano- Font de Parra donde se está proyectando crear el Museu de la Taronja.  A. Talavera.  Leer noticia completa en Las Provincias