Los agricultores siguen valorando los daños que el pedrisco del pasado martes ha causado en sus cosechas. En Carlet se han estimado las consecuencias en más de 6 millones de euros tanto por la fruta dañada como por los salarios que se dejarán de percibir en la manipulación de la cosecha en almacén.
Las pérdidas de Carlet se suman a las de Llombai donde hay dos zonas muy dañadas que perderán prácticamente toda la producción de fruta y el resto también tiene daños relevantes. En Alfarp se ha podido perder el 30 % de la fruta de verano y el 75 % de la cosecha de melocotón y nectarina se ha estropeado en Catadau.
Además de la afectación de la fruta, la pérdida de jornales agrarios en la Ribera va a ser muy importante ya que se van a perder trabajos y tampoco se conseguirán las cotizaciones derivadas de las jornadas de estas personas.  A. Talavera.   Leer noticia completa en Las Provincias