Carlet dona a los más necesitados la colecta agraria del Taller de Empleo

Iglesia Evangélica y Cáritas Parroquial hacen entrega a las personas más necesitadas

La especialidad de Fruticultura del Taller de Empleo ‘Recuperar-te’ combina trabajo con solidaridad. Dentro de su formación dual, el grupo de 11 alumnos ha habilitado dos parcelas municipales en el Polígono Industrial con una superficie total de 5 hanegadas en las que se han plantado diferentes tipos de verduras, frutas y hortalizas y se ha realizado la instalación de riego localizado. En la actualidad estas parcelas, en las que trabajan y aprenden los alumnos del Taller de Empleo, se encuentran en plena producción.  La producción, que se recolecta dos veces semanales, es cedida íntegramente a las asociaciones locales que se encargan de la gestión de los bancos de alimentos: Iglesia Evangélica y Cáritas Parroquial, para que las entreguen a las personas más necesitadas. Con ello, además del objetivo formativo, se consigue un fin social en el que se ayuda a los más desfavorecidos. Durante los meses de verano se intensificará esta colaboración con repartos prácticamente diarios. Este destino de la producción y esta posibilidad de colaboración,  supone además un incentivo añadido, una motivación extra, en el proceso formativo de los alumnos. Carlet optó por incluir en el Taller de Empleo la especialidad de fruticultura porque nuestra ciudad es eminentemente agrícola y muchos trabajadores están encontrando en este sector una nueva vía para reincorporarse al mercado laboral. En esta línea, la formación como fruticultores ofertada desde el Taller, pretende acompañar a estos trabajadores en su reconversión profesional. La introducción de nuevos cultivos y variedades posibilitaría incrementar los puestos de trabajo y reducir la estacionalidad. Estas medidas necesitan venir acompañadas de un proceso de formación y profesionalización del sector, que dote a los trabajadores de los conocimientos necesarios para llevar a cabo estos cambios. En el caso de Carlet cabe destacar que su orografía permite cultivar cerca del 80% del suelo y que una gran parte de esta superficie es de regadío, lo que unido a una climatología suave permite el cultivo de un gran número de variedades hortofrutícolas.