Con la Misa Solemne y la procesión a San Lorenzo Mártir, finalizan las fiestas de Alberic

El sermón de este año corrió a cargo de José Vicente Martínez, cura de apoyo en las dos parroquias de Alberic

Lunes, 10 de agosto, las Fiestas Patronales a San Lorenzo Mártir, en Alberic, han finalizado, con una Misa Solemne, en la Parroquia que lleva su nombre, y al finalizar Procesión por las calles de Alberic.
Guillermo Carrasco, cura de la dos parroquias de Alberic, ha concelebradola Solemne Misa, con sacerdotes que habían pasado por esta parroquia, como José Estellés (1974-1977),párroco actualmente en Xativa; Paco Caballer (parroquia San Lucas Evangelista de Cheste);Andrés Sanchez (1993, diácono), parroquia Ntra. Señora del Socorro en Benetusser; Paco González, hijo de Alberic: Antonio, diácono arciprestal, de Tous; y José Vicente Martínez, hijo de Alberic, cura de apoyo en las dos parroquias de Alberic, y que este año ha tenido el honor de hacer el sermón, profundo y claro sobre la Fe cristiana, enlazándolo con la vida y martirio de San Lorenzo Mártir.
El Coro Parroquial, con sus dulces voces, ha acompañado la celebración de la Misa Solemne.
Iglesia repleta de fieles,  ocupando lugar preferente, Toño Carratalá, alcalde, y los concejales del equipo de gobierno, Josep Puig, Nuria Salom Y Bernat Hervás: Isabel Pons Puig, Regina de Fira i Festes, acompañada por una representación de festeras.
Finalizada la misa, procesión acompañada por la laureada Sociedad Musical Alberic, autoridades, Regina de Fiestas, festeras, Guillermo Carrasco, párroco de Alberic, y todos los curas con-celebrantes de la misa, así como por muchos feligreses, realizaron el tradicional recorrido procesional de San Lorenzo Mártir, engalanadas sus casas y vecinos a las puertas.
Finalizada la procesión, se disparó un castillo de fuegos artificiales, dando por terminados los humildes pero emotivos actos, a San Lorenzo Mártir, Patrón de Alberic, donde muchos de sus hijos, llevan el nombre de Lorenzo.
La vida de San Lorenzo Mártir que nació en el año 221, fue uno de los siete diáconos regionarios de Roma, ciudad donde fue martirizado en una parrilla el 10 de agosto de 258, cuatro días después del martirio del papa Sixto II
La antigua tradición dice que cuando Lorenzo vio que la Sumo Pontífice lo iban a matar le dijo: "Padre mío, ¿te vas sin llevarte a tu diácono?" y San Sixto le respondió:
"Hijo mío, dentro de pocos días me seguirás". Lorenzo se alegró mucho al saber que pronto iría a gozar de la gloria de Dios.
Entonces Lorenzo viendo que el peligro llegaba, recogió todos los dineros y demás bienes que la Iglesia tenía en Roma y los repartió entre los pobres.
Y vendió los cálices de oro, copones y candeleros valiosos, y el dinero lo dio a las gentes más necesitadas.
Para Guillermo Carrasco, ha sido la última celebración a San Lorenzo Mártir, como párroco de Alberic, ya que en el mes de septiembre lo sustituirá Javier Abad.