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Don José, empresario de pro, consciente del daño que le ocasionarían unos delincuentes si le entraran a robar, toma la decisión de instalar un sistema de seguridad. Para ello empieza a buscar empresas que le oferten un sistema de seguridad para sentirse tranquilo y confiado, es consciente de que no es experto y tampoco conoce la tecnología actual, por lo que empieza a buscar empresas de seguridad por referencias de publicidad, de amigos y conocidos. Estas empresas mandan a sus comerciales, los cuales le proponen las soluciones que tienen aprendidas, pasándole un presupuesto y sin realizar el proyecto de seguridad. Al final elige el más económico, porque como no es experto en sistemas, pero sí entiende de números, elige el más barato. Firma el contrato sin leerlo apenas -el comercial le comenta: “el documento es un mero trámite para policía”-, y él confiado firma, tiene ganas de tener el sistema y, de esa forma, quitarse la preocupación que le inquietaba últimamente.
Al poco tiempo, vienen unos técnicos de palabras justas y, después de cierto guirigay, le montan su sistema. ¡Ah!, ya está tranquilo, les firma los partes de trabajo y se van. Apenas le han dedicado tiempo para explicarle la operativa de conectar y desconectar su sistema.
Un día, por despiste, entra en su empresa sin desconectar y al cabo de unos minutos le llaman… ¿De una central receptora?, pidiéndole la clave de identificación. Todo nervioso empieza a buscar en la cartera. ¡Uf… ,aquí está! La dice y comenta que ha sido al entrar. ¡Qué susto! Así le pasó varias veces y cada vez el trámite se lo cogía con más tranquilidad, asumía que su sistema funcionaba, pero que de vez en cuando se activaba, sin causa justificada.
Una buena mañana, cuando llegó a su empresa, se encontró lo que menos se pensaba. ¡Habían entrado los amigos de lo ajeno! ¡Todo estaba revuelto! La desesperación y la frustración invadieron todo su cuerpo.
¡Me han robado!
Pasos a seguir para elegir un buen sistema de seguridad
Elegir bien la Empresa de Seguridad
Que preste todos los servicios y no dependa de otras empresas.
Conocer su estructura.
Cercanía.
Confirmar la documentación aportada
Proyecto de Seguridad: Memoria de riesgos. Planos del sistema. Pliego de condiciones técnicas de elementos y de servicios. Valoración económica detallada.
Contrato registrado en Seguridad Privada.
Libro catálogo de elementos de seguridad: Certificado de puesta en marcha de la instalación. Certificado de comunicación y bidireccional con la Central Receptora. Registro de visitas y revisiones.
Registro de las operaciones realizadas en los mantenimientos sobre los elementos que componen el sistema. “Check list”.
Copia de la ficha con los datos que utilizará la Central Receptora y la Instaladora, conforme a la Ley de Protección de Datos.
Plan de revisiones del sistema de seguridad
Conocer los diferentes procedimientos de actuación
De la central receptora y del servicio técnico en averías y mantenimientos.
Tener claro el tiempo de respuesta y protocolos ante una alarma
Si vamos a tardar más de quince minutos en presentarnos, hay que contratar un servicio de acuda y custodia de llaves realizado por un vigilante de seguridad.
Asegurarse de que la empresa de seguridad nos aporta toda esta documentación y que la mantenga actualizada, es hacer que cumplan con su trabajo y poder exigir responsabilidades para que tengamos seguridad.
Segurinter