El abandono de los pasos de peatones de Alzira incrementa considerablemente el número de puntos negros en la ciudad
Martes, 13 de mayo de 2014 | e6d.es
• “Sra. alcaldesa, en este asunto está visto que su equipo de trabajo tiene la llave pero no hay manera de acertar con la cerradura. ¿Seremos nosotros los ingobernables?”
Las marcas viales en la calzada de Alzira presentan un estado lamentable. Este hecho puede provocar, como en el caso de las calles que presentamos hoy, que un lugar de paso de vehículos y peatones se convierta en un auténtico punto negro. Hemos hecho un recorrido desde la Plaça de Sant Judes, pasando por la calle Salvador Santamaría, la Plaça del General Dolz, O’Donell, Reyes Católicos, Pérez Galdós y Gandia. Por estas vías, cualquier ciudadano que circule en coche o en moto puede encontrarse con baches que pueden provocar la pérdida de control del vehículo, con la posible consecuencia de sufrir un accidente que no habrá sido por una distracción, sino por el mal estado de la calzada. El mal estado de la pintura de los pasos de peatones implica que no se cumplan unas mínimas condiciones: claridad, sencillez, coherencia… con el fin de facilitar a conductores y peatones la información necesaria para una correcta y segura circulación de ambos. Por ello, no es descartable los atropellos y alguna que otra desgracia.
Alzira incumple la normativa de marcas viales en muchos casos Según la Norma 8.2-IC, las marcas viales son líneas o figuras, aplicadas sobre el pavimento, que tienen por misión satisfacer una o varias funciones. El fin inmediato de las marcas viales es aumentar la seguridad, eficacia y comodidad de la circulación, por lo que es necesario que se tengan en cuenta en cualquier actuación vial como parte integrante del diseño, y no como mero añadido posterior a su concepción. En cualquier manual de educación vial las señalan como elementos que sirven, entre otras cosas, para disminuir el número de accidentes y, con ellos, daños materiales y humanos. La importancia de la señalización radica en el hecho de que sean visibles sin esfuerzo y sean fácilmente reconocibles, circunstancias que no se dan en el caso de Alzira.
Alguien es responsable de este abandono La responsabilidad de la instalación de las señales y marcas viales corresponde a la oficina técnica de Urbanismo, cuyo concejal es Enrique Montalvá. Los políticos que nos han tocado viven en una feliz irresponsabilidad y la nómina que les pagamos da la sensación, en ocasiones, de no estar vinculada a la capacidad y buena disposición para desempeñar su tarea. Queremos pedir desde este diario que se empiecen a dar soluciones ya a las irregularidades como la que nos ocupan en este artículo y que, aunque no lo crean, preocupan mucho a los ciudadanos. La palabra “crisis” volverá a servir de excusa, pero hay dinero para lo que se quiere. El mal estado de las calzadas puede incrementar el número de reclamaciones por incidentes causados por este abandono, con las consiguientes sanciones administrativas. Sra. alcaldesa, en este asunto está visto que su equipo de trabajo tiene la llave pero no hay manera de acertar con la cerradura y, de ello, usted es la máxima responsable. Camine un poco por su ciudad y comprobará el estado de abandono de prácticamente todas las marcas viales en la calzada y la cantidad de baches que hay, algunos de auténtico escándalo. Alegar que no hay un duro para pintar, tratándose de la seguridad física de sus ciudadanos, nos hace pensar que o somos nosotros los ingobernables o que ustedes no le hacen un gol ni al arco iris.
El Seis Doble
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