Desde el pasado mes de mayo la pedanía de Cortichelles dispone de una nueva depuradora tras varios años desembocando agua residual que no cumplía los parámetros exigidos por la Confederación Hidrográfica del Júcar debido al mal funcionamiento de la instalación. Las obras han consistido en modernizarla y en renovar todos los elementos que la componen ya que el mantenimiento en su día fue nulo, provocando su deterioro y el mal funcionamiento de la misma. En definitiva “se ha adecuado la estructura existente y se han instalado un decantador, una separadora de grasas y un digestor nuevos”, explican desde el Departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Turís.
“Ahora lo que procede es revisar la instalación cada dos o tres meses para su correcto mantenimiento, ya que la dejadez con la que actuó el anterior equipo de gobierno es lo que nos ha llevado a esta situación”, apunta la alcaldesa, Pilar Lozano. El proyecto se ha realizado en dos fases a cargo del Plan de Núcleos de la Diputación de Valencia y asciende a 18.000 euros en 2012 y 15.000 euros en 2013, aportando el Ayuntamiento en este último caso 3.000 euros adicionales.