Ahora, el verano, además de las fiestas de Sant Bernat también trae el Boletín de Información Municipal (BIM). Sí, sí, como lo leen ustedes; el famoso BIM (o Viure Alzira) se ha publicado en nuestra ciudad… ¿y por qué? Pues tal y como dice la alcaldesa porque “lo hemos considerado oportuno para hacerles llegar todos los acontecimientos que han marcado la actualidad municipal de este primer semestre de 2014”.
¡Increíble! Para informarnos de los acontecimientos de los primeros seis meses de 2014. Quizá es que a la gente, a estas alturas, casi a finales de julio, le importa mucho, por poner varios ejemplos, que en enero se inició el curso de FRE de Operaciones Auxiliares de Servicios Administrativos y Generales de IDEA o que se presentó la Guía ECA de Alzira; que en febrero y marzo se asfaltó y amplió el camino de Fracà y que por aquellos meses “L’alcaldessa respon” hizo un tour por algunos barrios de Alzira, o algo muy importante es saber que 300 peregrinos hicieron la Ruta Bernardina; que en abril se mejoró la Font del Garrofer y se sustituyeron bancos en la Plaza del Reyno… y así podría seguir con varias noticias más que han sido motivo suficiente para sacar, según la alcaldesa, esa revista local.
Lo que no nos ha dicho la alcaldesa es que además de informarnos de algo más pasado de rosca que una canción de Danny Daniel, este BIM (Bastidas Images Marketing) nos ha dejado medio centenar de fotografías suyas, todo un “book” particular. Hablando de fotos, lamentable algunas imágenes en las que ni se distingue a las personas. Sugiero al departamento de Propaganda que adjunten en la próxima revista una lupa dentro de una fundita de plástico pegada en la contraportada. De nada.
Hay que llamar a las cosas por su nombre. Esta revista no es más que una pamema propagandística, un despilfarro de dinero público que sale nuestros bolsillos y que, por supuesto, no nos enteraremos cuánto nos ha costado. Ante semejante despilfarro cabe preguntarse si no se tiene vergüenza política por gastarse algunos miles de euros en este panfleto mientras hay familias que no llegan a fin de mes, y digo que no cabe esa pregunta porque es evidente que no, no se les cae la cara de vergüenza, de lo contrario, hace ya mucho tiempo no podrían ni mirarse al espejo.
Lo que yo me preguntaría es ¿cuál es el fondo concreto de esta revista y quién o quiénes se benefician de su publicación? Ya está bien de engañar al pueblo predicando austeridad mientras se derrocha en cosas como esta. A estos políticos, les sale por la boca una cosa, hacen la contraria y siempre lo pagamos nosotros.
Por cierto, ¿en qué han quedado las palabras grandilocuentes de Lahuerta cuando dijo que el “superávit presupuestario tendría el máximo retorno en la ciudadanía”? ¿A esto se refería ese gurú de las finanzas alzireñas? ¿A la publicación de una bochornosa revista? Porque, hasta la fecha… nada de nada. Os observo.
Información relacionada publicada el 7 de enero de 2014
La desfachatez no es por la revista en sí, sino por su coste que, por cierto, el ciudadano de Alzira se ha quedado sin saber su cuantía, y cuyo importe bien podría haber sido destinado a cubrir cualquiera de las muchas necesidades que tiene nuestra ciudad.
En el pleno celebrado el pasado 23 de diciembre, Paco Gimeno, de Compromís per Alzira, preguntó a la responsable de Comunicación el gasto que ha supuesto la edición del BIM. Ana Alarcón contestó que “mil euros menos que el año anterior”. La respuesta no fue clara ni concreta, la edil supo escurrir el bulto porque no le interesaba hablar del tema, salió por peteneras. Voy más allá, por tratarse de un Pleno de carácter público no puede faltarse al respeto al ciudadano con una respuesta tan imprecisa. Ana Alarcón debe suponer que a muchas de las personas a las que representa sí que les gustaría saber qué costó el BIM.
Ana Alarcón, estás a nuestro servicio, ¿por qué no nos dices qué costó el BIM?