La capacidad de movilización del Cotif ha quedado demostrada con el paso de los años, con algunos de los mejores jugadores del mundo pasando por el terreno de juego de Els Arcs o después volviendo a las gradas para recordar viejos tiempos. La última demostración ha sido la primera salida del mundo arbitral de Las Rozas, con la aceptación por parte de la Federación Española de Fútbol de que realizasen las pruebas físicas en las instalaciones de la ciudad deportiva alcudiana, en los aledaños del campo que todos los veranos acoge el torneo internacional sub-20 que el pasado año ganó la selección nacional de Brasil.
Las pruebas están divididas en tres actividades: la primera, de velocidad, con seis series de cuarenta metros que tienen que superar en menos de 05'80''; segundo, resistencia, con una carrera continua de dos kilómetros a completar en menos de 07'30'' (los árbitros) y 8'00'' (los asistentes); y para finalizar, una prueba de campo, un circuito cuadrado con carrera hacia atrás, frontal, y lateral, con un tamaño de 25x25m para los asistentes y de 50x50m para los árbitros, teniendo que superar la prueba en 28 y 53 segundos respectivamente.
Estos controles los realiza el ente federativo cuatro veces al año para comprobar que los colegiados no descuidan su entrenamiento y forma física, pero siempre han tenido lugar en las instalaciones de Las Rozas, la sede oficial. Durante la semana pasarán los árbitros de las diferentes categorías, el pasado martes fue el turno de los árbitros y asistentes de 2ª División y para ayer miércoles estaba preparada la presencia de los colegiados de la Liga BBVA, a excepción de Hernández Hernández y del Cerro Grande que pitarán los encuentros de Copa del Rey de hoy.
Los controles levantan gran expectación al ser vinculantes. En caso de no superar las pruebas, los colegiados dejan de arbitrar y tienen un mes para recuperar la forma física y superar las pruebas, si quieren continuar en la categoría o como árbitros profesionales.