El equipo de gobierno de Alzira presentó el pasado lunes el presupuesto municipal para el ejercicio 2016 con una "carga importante de sobriedad, real", según declaró el alcalde de Alzira, Diego Gómez. La máxima autoridad municipal manifestaba que el Ayuntamiento se encuentra "cogido y ligado" por la anterior corporación que ha dejado una operación de crédito pendiente de pagar por el Huerto de Redal que asciende a 7'7 millones. "En 2016 vamos a intentar hacer lo que podamos, salvando la situación y proyectando nuestra visión de ciudad a partir de 2017", confirmó el alcalde.
Gómez insistió que en los últimos seis meses se han tenido que pagar los proyectos del anterior gobierno "con un remanente de 7 millones de euros de un total de 42 que estaban presupuestados y que hemos tenido que ir navegando con modificaciones de crédito".
El tripartito comienza en 2016 un nuevo proyecto de 36 millones y medio de euros "que nos devuelve a la realidad de 2014". Será un presupuesto con menos ingresos y más gastos que el año anterior, con una bajada del 6% del IBI. Para Gómez, el Partido Popular "se columpió con el descuento en el IBI del 5% en todos los recibos domiciliados".
El gobierno local confía en la inyección de unos planes por parte de la Diputación y en que la Generalitat cancele el reconocimiento de deuda de más de 700.000 euros que tiene suscrito con el Ayuntamiento de Alzira. Así mismo, también se espera que se reconozca de manera oficial otros 800.000 euros pendientes.
Compromís, PSOE y EU destacan en esta etapa que arranca con el años 2016 la apuesta por la partida de ocupación, el incremento de la partida de servicios sociales, mantener la bajada de los gastos de alcaldía y el esfuerzo por compensar las deudas "éticas y económicas" del personal.