Santiago Castillo y un servidor nos preparamos para otra sección de “Pulso Económico” a través de los micrófonos de El Seis Doble. Al compañero Alfonso lo damos ya por perdido; parece ser que ha fichado por otro medio de comunicación donde le pagan más por sus colaboraciones.

Hoy quiero relatar mi experiencia propia en la “Oficina Vaselina”. Para todos aquellos que no sepan de que estamos hablando, vamos a ponerles en contexto: nuestros gobernantes locales han habilitado una oficina de información a la que hemos bautizado cariñosamente como la “Oficina Vaselina”, donde podemos dirigirnos y donde nos explicarán, de forma muy suave, por qué motivo, cómo, cuándo y cuánto tenemos que pagar el resultado de la última regulación catastral, de la cual nadie se hace responsable, se van pasando la pelota de unos a otros.

Pues bien, allí han dispuesto entre 12 y 14 mesas donde se atiende a los ciudadanos, no sé si todas están dedicadas exclusivamente a este menester o sirven para otras dudas y problemas de la ciudadanía.

Los que se adelantaron dentro del plazo inicialmente indicado, ya han pagado. Los que no llegaron por cualquier motivo, muchos posiblemente porque no pueden hacer frente a esta regulación, les informan que sin ningún tipo de recargo pueden hacer efectivo el pago hasta el próximo 20 de mayo.

Resumiendo, que han puesto en marcha un servicio de atención al ciudadano para indicar una información que van a enviar por carta a toda la ciudadanía.