¿Han hablado alguna vez con sus hijos sobre drogas?
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Muchos padres pueden pensar que sus hijos nunca consumen drogas, que eso lo hacen los hijos de otros. La pregunta es ¿han hablado alguna vez con sus hijos sobre drogas? ¿Saben si las han probado o son consumidores habituales? ¿Conocen los adolescentes los efectos adversos que provocan estas sustancias tóxicas en sus cuerpos? ¿Cómo y porqué su hijo ha caído en las drogas?
La edad de inicio de los adolescentes que consumen drogas, tanto legales como ilegales, es cada vez más alarmante, las estadísticas la sitúan entre los 12 y 13 años. Algunos padres pueden creer que las drogas legales (alcohol o tabaco) son menos dañinas, pero esto no es más que un error. Todas las drogas son gravemente perjudiciales si son consumidas durante el proceso de desarrollo de los adolescentes. La mayor parte de los accidentes de tráfico relacionados con jóvenes y los delitos como abusos sexuales, actos violentos, problemas familiares, etc.tienen que ver con el consumo de estas sustancias. Las drogas más consumidas por los jóvenes son el alcohol, el tabaco y el cannabis, estas sustancias y otras son cada vez más accesibles a ellos. Hablar de drogas en edades de riesgo es lo más adecuado para concienciarles.
No existe un único motivo por el que un adolescente decide comenzar a tomar drogas. Tal vez las usen para divertirse, para colocarse, para ser aceptados por el grupo al que pertenecen o tal vez las usen para escapar de algún problema que acontece en su vida. Sea cual sea el motivo hay que indagar en él y poner soluciones, lo más probable es que sus hijos no conozcan los efectos negativos de las drogas.
Muchos jóvenes muestran signos de que están consumiendo drogas, tanto a nivel cognitivo como a nivel conductual y en raras ocasiones reconocerán que tienen un problema con las drogas. Algunos de los siguientes síntomas pueden poner a los padres en alerta:
- En el ámbito familiar los padres pueden detectar cambios conductuales en sus hijos como mentir con frecuencia, utilizar la violencia física o verbal para resolver problemas, estallidos emocionales, rápidos cambios de humor, llamadas a deshoras o salidas de casa con máximo secretismo.
- También se pueden observar cambios fisiológicos, como por ejemplo ojos llorosos y rojos, pérdida o ganancia de peso,desajustes en sus hábitos de sueño y ansiedad.
- A nivel cognitivo, los jóvenes que consumen les cuesta concentrarse, prestan poca atención, sufren pérdida de memoria a corto plazo y sienten mucha sensibilidad hacia ellos mismos y poca hacia los demás.
- En el ámbito escolar sus calificaciones pueden bajar considerablemente, pueden mostrar una actitud desafiante hacia sus profesores y también pueden faltar a clase.
Ante el descubrimiento de que su hijo consume drogas no debe cundir el pánico. Se debe afrontar la situación sin banalizarla, tratando de comprender cuál es el motivo que le ha llevado a caer en las drogas. Lo más importante es que acudan a un profesional, los padres deben saber que la drogodependencia es una enfermedad que afecta a múltiples ámbitos de la vida del paciente, tanto a nivel físico y psicológico, como familiar y social. En el centro Despierta de Alzira podemos ayudarles y asesorarles en este tema.