OPINIÓN: JAGS
La condición de ciudadano (persona considerada como miembro activo de un Estado, titular de derechos políticos y sometido a sus leyes) solo la adquirimos cuando confirmamos que en el entorno tenemos acceso a los recursos básicos para el ejercicio de derechos y deberes inherentes a las personas.
En los últimos años se está hablando en Alzira de rebajar las aceras para mejorar la accesibilidad, escuchamos la puesta en marcha de semáforos sonoros, vemos como se adecuan edificios públicos, constatamos que existen plazas de aparcamiento reservado para personas con movilidad reducida en muchas zonas de la población, pero ¿alguien ha escuchado hablar de un plan estratégico que aglutine soluciones y proyectos globales para hacer una ciudad para todos?, ¿sabemos de la existencia de una política integral de promoción y gestión de la accesibilidad universal en el ayuntamiento alzireño?.
Sin una visión general, y con esa eterna celeridad del cortoplacismo político que mide todo en cuatrienios, sin una apuesta real de futuro, los que en cada momento ostenten el poder insistirán en disfrazar la ciudad de accesible, continuaran poniendo parches a las necesidades habitacionales, seguirán haciéndose fotos periódicamente junto a pequeñas obras que venderán como integradoras, continuarán ocupando minutos de radio y televisión con palabras hermosas sobre la igualdad de todos los ciudadanos, e incluso utilizaran comunicados de prensa para enseñar al mundo entero su interés por la autonomía personal de quienes lo tienen un poco más complicado.
Nuestros políticos, esos que hemos elegido y que tantos disgustos nos dan, son sabedores de que lo que dicen que hacen para convertir la ciudad en accesible, en realidad son apaños, por eso intentan centrar los esfuerzos en promocionar las Fallas, la Tamborada, los conciertos de Sant Bernat, la reganyà y la Biosfira. Todos ellos eventos puntuales, que centran en días contados la atención de posibles visitantes, turistas, o gente de paso, pero ¿y si algún día pudiéramos promocionar una Alzira de verdad accesible?, hay ciudades como Milán, Boras, Berlín, Salzburgo, Gotemburgo, o la ciudad española de Ávila, que ya lo están haciendo, y no les ha ido nada mal, han visto como ese valor añadido de las ciudades sin barreras les hace ganar en turismo a lo largo de todo el año. ¿Y si algún día pudiéramos leer que la Red Europea de Turismo Accesible, entrega su premio a Alzira como la población europea más accesible?. Eso mientras los gobernantes locales continúen con su visión puramente electoralista de las políticas en materia de accesibilidad, ésta continuará por desgracia siendo tan solo un sueño.
Y es que quizás pedimos demasiado a nuestros gobernantes cuando les exigimos que utilicen los recursos de manera racional, quizás sea pedir demasiado, que piensen más en un futuro para todos, que en un FITUR para unos pocos.
JAGS
PD: Es necesario que las autoridades locales realicen obras para adecuar aquello que en un pasado estaba mal hecho. Pero es mucho más interesante que incorporen la accesibilidad como una condición importante de toda su gestión. De esa manera la accesibilidad no supone un coste añadido.