La escritora de L'Ènova Amparo Cabrera ganadora de la CXXX edición de los «Jocs Florals»

«Somos pocos, pero la poesía en valenciano no va a morir»

La «Flor Natural» de la CXXX edición de los «Jocs Florals» habla en valenciano y lo hace en femenino. Amparo Cabrera (l'Ènova, 1964) ha roto con los precedentes de este certamen literario, organizado por Lo Rat Penat, al convertirse en la escritora más joven que se alza con el gran premio del concurso, con 130 años de historia. Además, esta joven valenciana es la tercera poetisa que ha podido inscribir su nombre en el extenso palmarés de los «Jocs Florals», después del de Amelia Comba y su amiga María Jesús Coves. Así pues, no es extraño que Cabrera se sienta feliz tras el reconocimiento a su labor poética. «Una nunca se lo espera. El año pasado me dieron el 'Accèsit' y eso ya me indicaba que estaba en el buen camino, pero no me lo esperaba», resalta la poetisa. «La primera a la que llamé para contárselo fue a María Jesús Coves, que dio un grito cuando se enteró. Es verdad que somos pocas escritoras de poesía en valenciano, pero todas nos apoyamos mucho». De hecho, Coves ha sido una figura fundamental en el crecimiento literario de Cabrera, quien asegura que se ha sentido siempre muy respaldada por ella.El jurado de Lo Rat Penat quedó prendado con la obra que Cabrera presentó a la competición literaria, bajo el título de «La Rosa».
«En el poema trato de hablar de mis sentimientos. Cada pétalo de la rosa representa una vivencia, ya sea en mi juventud, en mi infancia o con mi familia». El trabajo lo comenzó el pasado verano, y ahora, tras ganar por fin la «Flor Natural», tiene mucha faena por delante con los 'llibrets' de falla. «Siempre estoy escribiendo: hago algo de novela, Miracles de Sant Vicent, y ahora sobre todo 'llibrets' de falla», anuncia la escritora de l'Ènova. Mirando hacia el futuro, Cabrera se muestra optimista sobre la vitalidad de la poesía valenciana y en valenciano. «Es verdad que somos pocos, pero la poesía en valenciano no va a morir. Se mantiene la gente que escribe y entra gente nueva. Quizá la poesía formal da respeto a los jóvenes, pero creo que en los 'llibrets' falleros y en otros ámbitos se puede ver cómo hay mucha gente joven que sí que escribe».
«Un libro siempre es un libro».Leer noticia completa en levante-emv.com