En la línea de promover una movilidad más sostenible en la comarca, la Mancomunitat de la Ribera Alta participa en ECOTALE, un proyecto europeo cuyo principal objetivo es la internalización de los costes externos del transporte (el ruido, la contaminación atmosférica, los atascos…) con actuaciones que minimicen el impacto medioambiental, social y económico de la movilidad. Algunos ejemplos en este sentido son las ayudas e incentivos a vehículos no contaminantes, la construcción de circunvalaciones de núcleos urbanos, la instalación de barreras acústicas y vegetales en vías muy transitadas o las medidas para reducir los accidentes de tráfico y la congestión.
La primera fase del proyecto acaba de finalizar y ha consistido en la selección y evaluación de los casos más exitosos a nivel nacional en materia de internalización de costes externos del transporte. Este conjunto de buenas prácticas ha sido difundido con el resto de mancomunidades de la Comunidad Valenciana, en el encuentro de entes comarcales autonómicos que se celebró ayer en Llíria con la finalidad de poder adaptarlas a las diferentes realidades.
Con toda la información obtenida se diseñará un proyecto piloto relacionado con la movilidad sostenible y finalmente se elaborarán las conclusiones en una guía de buenas prácticas. El presidente de la Mancomunitat de la Ribera Alta, Cristóbal García, afirma que este proyecto pone a disposición de las autoridades locales las experiencias más innovadoras en materia de movilidad sostenible, de manera que las administraciones locales y supramunicipales podrán aplicar medidas que ya funcionan con éxito en otras ciudades de Europa para reducir el impacto del transporte.
Este proyecto, que está financiado por la Comisión Europea, tiene un presupuesto total de 1.500.000  euros. Junto con la Mancomunitat de la Ribera Alta, participan otras seis instituciones europeas: la Universidad de Bolonia (Italia), el Instituto de Planificación y Urbanismo de la Región Île de France (Francia), la Universidad de Helsinki (Finlandia), la ciudad de Poznan (Polonia), la Universidad de Bucarest (Rumanía) y la región de Salónica (Grecia).