La Policía Nacional ha desmantelado en Alzira una plantación de 1.200 plantas de marihuana

En la operación han sido arrestados cuatro hombres

Agentes de la Policía Nacional han detenido a ocho personas, dos mujeres de 42 y 46 años, de origen alemán y francés respectivamente, y seis hombres de entre 33 y 66 años, de origen español y rumano, y se han desmantelado dos grandes plantaciones de, al parecer, marihuana, en las poblaciones de Palma de Gandía y Alzira, interviniendo 2.800 plantas y diverso material para el cultivo en interior como focos de luz y lámparas, además de seis puñales, una pistola semiautomática, cinco catanas, un puño americano, una báscula de precisión y tres tabletas de una sustancia vegetal, al parecer hachís, con un peso de 300 gramos.
Las investigaciones se iniciaron al tener conocimiento los agentes de la existencia de un grupo de personas que podrían estar organizando varias plantaciones de marihuana en la zona de Gandía, Alzira y Xátiva.
Los policías localizaron en Palma de Gandía dos chalets de los que salía un fuerte olor a lo que podría ser marihuana, así como comprobaron que tenían la luz enganchada a un poste de suministro, y había grandes medidas de seguridad, como vigilancia mediante un circuito cerrado de televisión  y perros.
Los investigadores realizaron un registro en los dos chalets y arrestaron a cuatro personas, dos mujeres y dos hombres, interviniendo 1.600 plantas de, al parecer, marihuana, además de una pistola semiautomática, cinco catanas, un puño americano, tres cajas de munición con 79 proyectiles, seis puñales, y una báscula de precisión, entre otros efectos.
Continuando con las investigaciones, los agentes localizaron una segunda posible plantación en la localidad de Alzira, comprobando igualmente que carecían de contrato de suministro eléctrico y que el lugar desprendía un fuerte olor a lo que podría ser marihuana,  por lo que realizaron un registro y arrestaron a otros cuatro hombres, interviniendo 1.200 plantas y una pistola simulada.
Los policías consideran a los ocho detenidos los presuntos autores de los delitos de pertenencia a organización criminal, defraudación de fluido eléctrico y contra la salud pública. 
Los agentes comprobaron que a uno de los arrestados le constaban varias reclamaciones judiciales en vigor, concretamente cinco órdenes de detención para su ingreso en prisión, y otras cinco para su detención y presentación en diferentes juzgados.
De los detenidos, cuatro de ellos con antecedentes policiales, dos quedaron en libertad una vez se les tomó declaración, mientras que los otros seis pasaron a disposición judicial, ingresando en prisión cuatro de ellos.