La Unión de Trabajadores de la ONCE de Valencia aplaudió que el Ayuntamiento de Alzira sonorizara los semáforos de la ciudad para de esta manera adaptarlos a las necesidades de las personas ciegas y con deficiencia visual, buscando además un sistema que evitara la emisión de sonidos innecesarios y que cumpliera con la protección contra la contaminación acústica.
La información ofrecida por el departamento de Comunicación del Ayuntamiento de Alzira el pasado mes de mayo que  hablaba de la instalación de un sistema de dispositivos para sonorizar un total de 39 postes semafóricos en los pasos de peatones del casco urbano, se convertía en una gran noticia para todas las personas con problemas graves de visión y especialmente para las trabajadoras y trabajadores con discapacidad visual adscritos a la Agencia Administrativa que la ONCE tiene el Alzira y que da soporte a cerca de 200 trabajadores, de los que un porcentaje importante son personas con alguna discapacidad relacionada con la vista.
La organización sindical UTO-UGT Valencia, se encuentra preocupada, porque quince días más tarde del anuncio de la instalación todavía no se encuentran operativos estos dispositivos. Los retrasos en la habilitación del servicio juegan en contra de la seguridad vial de los casi 250 afiliados y afiliadas que pertenecen a la Agencia Administrativa que la ONCE tiene en Alzira y a los cerca de 40 trabajadores con alguna discapacidad visual que se desplazan a la Capital de la Ribera Alta, bien para acceder a su puesto de trabajo o para desarrollar sus quehaceres diarios.
Por todo ello la Unión de Trabajadores de la ONCE de Valencia, cree urgente que se lleve a cabo la reunión pendiente entre el Ayuntamiento y la Organización Nacional de Ciegos Españoles, para poner en marcha esta iniciativa que ayudaría en la prevención de riesgos laborales y haría de Alzira una ciudad un poco más accesible.