Nos hemos puesto en contacto con Diego Gómez, de Compromís per Alzira, y con Isabel Aguilar, del PSOE, para pulsar el estado de las negociaciones ante un posible pacto de fuerzas políticas en Alzira que van a intentar romper la mayoría que, según las votaciones del pasado 24 de mayo, tiene el partido Popular. Este probable entendimiento político llega a la recta final, ya que tan sólo faltan cinco días para que se celebre la sesión de investidura en el Ayuntamiento.
Diego Gómez nos comenta que considera oportuno que "deben ponerse de acuerdo los partidos progresistas de izquierdas para que se pueda llevar a cabo lo que la ciudadanía ha votado y para que haya un cambio". Así mismo, centra el desarrollo del convenio en tres líneas de trabajo: un decálogo de las primeras acciones de gobierno, cómo facilitar la negociación para llegar al acuerdo de gobierno y la revisión del organigrama de funciones en el Ayuntamiento.
Las primeras reuniones entre Compromís, PSOE y Esquerra Unida "son positivas y con intenciones de llegar a un acuerdo de gobierno". Para Gómez, ser el partido más votado significa encabezar las negociaciones iniciales y "liderar el cambio".
Los tres grupos políticos son conscientes de que no pueden llegar al día 13 sin tener claro cuál va a ser la intención de voto para poder coger la gobernabilidad de la ciudad. Gómez piensa que "la ciudadanía no perdonaría jamás que no hayamos sido capaces de ponernos de acuerdo para un cambio de gobierno en la ciudad".
Ante la petición del PSOE de compartir la alcaldía, el portavoz de Compromís piensa que "romper una cuerda en favor de uno u otro no es el tipo de negociación que necesitamos".
Por su parte, Isabel Aguilar manifiesta que las negociaciones desde el PSOE siempre han estado y están abiertas "y nunca con la negativa, como parece ser que ha dicho un medio de comunicación. El único 'no' debe ir decantado a que no gobierne la derecha".
Para Aguilar, "la ciudadanía no optó por darle la alcaldía a un partido concreto, quiere que gobierne la izquierda y no una mayoría absoluta".
En cuanto a un reparto proporcional de la alcaldía apuntala que quieren "defender el derecho que nos ha otorgado la ciudadanía; con once concejales le correspondería al PSOE un año y pico, por lo que solicitamos un año la alcaldía. Lo que no aceptamos es que salga en un medio de comunicación que haya una negociación cerrada".
Para finalizar, Aguilar es concluyente, no deja espacio a la duda: "No habrá paso atrás, para que no vuelva a gobernar la derecha en Alzira. La negociación sigue abierta y continúa".

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