Las peñas cadafaleras aceleran la construcción de la plaza de toros de Algemesí que deberá estar a punto a mediados de la próxima semana para que dé inicio una nueva edición de la Setmana de Bous de la localidad. Cuerdas, madera y clavos son los tres elementos que se combinan para crear una obra de artesanía que acoge las novilladas y los espectáculos nocturnos que cada año conforman el cartel de la Semana Taurina. Se trata de un espacio único y temporal, pero que vive en la mente de los algemesinenses durante todo el año. Fieles a la tradición y después de que finalice la Processó de Volta General de las Festes de la Mare de Déu de la Salut en las primeras horas del día 9 de septiembre, las peñas empiezan a dejar las maderas en la plaza, ubicadas cerca de su espacio, para iniciar la frenética construcción. A principios de septiembre las diferentes peñas cadafaleras empiezan a preparar el traslado de la madera, porque cada peña monta su trozo de plaza, su cadafal, de forma totalmente independiente y siempre atentos a la exigencia de que cada cadafal es independiente en su construcción y no se debe apoyar en ninguna pared.
El sistema de construcción se estableció en 1943 por el arquitecto Juan Segura de Lago y su milimétrica construcción únicamente ha tenido que adaptarse a las más exigentes normativas de seguridad con el paso de los años y las diversas legislaciones a las que se ha adaptado el coso algemesinense. Son días frenéticos de actividad de montaje contra el reloj porque todo debe de estar a punto y en su sitio para pasar la oportuna. Durante unos días, la plaza Mayor de Algemesí se convierte en una carpintería al aire libre llena de gente que trabaja en la construcción de la plaza que va tomando forma poco a poco.