La Asociación de Padres Discapacitados Psíquicos profundos (ASPADIS), que preside uy gestiona el sacerdote Vicente Aparicio también está pasando por momentos difíciles como consecuencia de los impagos de la Generalitat. El padre Aparicio confirmó ayer a LAS PROVINCIAS que en este momento están pendientes de cobrar «1,4 millones de euros de las subvenciones pendientes».
Explicó que recientemente les abonaron el 30% de las cantidades comprometidas para este año. Quedan una buena parte de lo comprimetido este año y otra de la subvención correspondiente al año pasado.
Aspadis atiende a unos 80 niños discapacitados psíquicos profundos en cuatro centros que se encuentran en la provincia de Valencia: Padre Poveda en Polinyà de Xúquer, Virgen Niña en Carcaixent, así como las residencias Salvador Amat y Javier Jarque en la urnbanización San Lorenzo de Alberic.
Se da la circunstancia, tal como apunta el sacerdote, de que en la residencia de Alberic «acogemos a niños discapcitados profundos que no tienen a nadie, que son huérfanos o proceden de ambientes desestructurados, y que correspondería atender a la administración, que ahora no paga». L. Garcés.
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