El pasado 16 de mayo, el entonces llamado ‘Departamento de Comunicación del Ayuntamiento de Alzira’, hoy ‘Gabinet de Comunicació de l’Ajuntament d’Alzira’, anunciaba que el Ayuntamiento de Alzira había instalado unos dispositivos acústicos para semáforos, dirigidos a personas invidentes y con deficiencias visuales para facilitar el tránsito peatonal de este colectivo. En la misma nota de prensa, la entonces concejala de Acción Social Chelo Martínez, sí, la misma que se lució en su día con una frase que pasará a la historia local en la que afirmaba que “no había que mezclar churras con meninas”,  dijo textualmente que: “Ésta era una de las demandas que desde este colectivo nos hacían y, como ya dijimos en su día, era un proyecto que teníamos en marcha y que poco a poco se irá ampliando a otras zonas de Alzira”.
Pues bien, hoy, más de dos meses después, los semáforos no están habilitados y, mucho menos, se han ampliado, y habría que añadir que ni se les oye. ¿Qué quería decir la exconcejala con estas declaraciones? Nada, absolutamente nada, era un brindis al sol. Hay que recordar que era periodo electoral y algo había que decir.
Ahora ha cambiado el equipo de gobierno y el tripartito, que en alguna ocasión preguntó en los Plenos por los semáforos, ¿qué ha hecho al respecto? Nada. Ha cambiado el equipo de gobierno, pero la vida sigue igual… tanto en los semáforos para invidentes como en los impuestos; digo esto porque ya ha llegado el primer plazo de la tasa de reciclaje, ese impuesto que los del tripartito decían que quitarían.
Ahora estamos en pleno julio y luego viene agosto y ya se sabe que en este país esos meses son sagrados. Después, en septiembre, pasará lo de siempre, la excusa más recurrida: no hay dinero.
Ni el PP, ni el tripartito. Lo de siempre, unos por otros y la casa por barrer. Me parece a mí que los de la ONCE  tardarán en utilizarlos en Alzira. Os observo.