En Alzira no tenemos suerte. Ya hace años que, no sabemos si por pereza, negligencia o abandono, los casos de dejadez se suceden cada dos por tres. El último, el que hoy aún pueda verse ocupando la vía pública los árboles de Navidad que el Ayuntamiento dispuso para estas pasadas fiestas, uno en la misma Plaza Mayor y otro delante mismo del Consistorio.
Algunos van a pensar que no pasa nada, que no tiene importancia o que es un detalle irrelevante... No obstante, dar una buena impresión de la ciudad moderna y avanzada que todos anhelamos no se consigue de esta manera. El efecto que da este abandono puede dar pie a pensar para otros que tenga que ver con lo que proyectamos de lo que somos por dentro y por fuera.
Ángel Ganivet afirmaba que "si en la vida práctica la dejadez se hace visible por el no hacer, en la vida intelectual se caracteriza por no prestar atención; y de esta falta de atención, actitud, cuidado e interés tenemos la hemeroteca repleta.
E6D