Ayer domingo las calles de Benifaió acogieron de nuevo una de las procesiones más antiguas del municipio, la conocida como “Processó dels Combregars” o Comulgar de impedidos.
Bajo el palio salió un año más en procesión la sagrada forma de Jesús acompañada por el cura párroco, corporación municipal y centenares de vecinos para acudir hasta el domicilio de aquellas personas que por motivos de salud no pueden trasladarse a recibir el cuerpo de cristo en las eucaristías.

Dos mujeres por vez primera como portadoras
Una de las novedades de la procesión de este año es que los palos del palio que cogen durante el recorrido el cuerpo de cristo fue llevado además de por hombres
por dos mujeres. Ser portador del palio es algo voluntario que cada año deciden llevarlo a cabo vecinos del municipio. En esta ocasión, y por vez primera según confirman desde la organización del acto religioso, dos mujeres decidieron ser portadoras junto a varios vecinos.
Una procesión tradicional que todos los años tras la pascua se celebra en Benifaió para acercar la comunión a los impedidos del municipio.