Réplica a Lola García
Opinión | Xavier Cantera

"No he leído ninguna nota oficial del PSOE de Alzira explicando su decisión y los motivos sobre su presencia institucional, como parte del gobierno municipal, en celebraciones religiosas, como sí lo ha hecho EU"

Creo que su comentario merece algo más que una corta respuesta.  Comencemos por las afirmaciones en las que estamos los dos de acuerdo. "No estoy muy enterado", "Participo poco en el partido", "No pinto nada en el partido", "No me entero de la película", "Respeto su opinión" y yo también y "Estoy muy desfasado del socialismo alzireño". Todo esto es cierto. Pero, antes de seguir, debo decirle que no he leído ninguna nota oficial del PSOE de Alzira explicando su decisión y los motivos sobre su presencia institucional, como parte del gobierno municipal, en celebraciones religiosas, como sí lo ha hecho EU. Es muy clarificador lo que me dice referente  a que ha sido la Ejecutiva quien lo ha decidido y que también estaba contenido en el programa electoral a las municipales. Así es, dice: "Respectarem i defendrem al màxim el principi de laïcitat i de neutralitat confessional en l’àmbit públic i institucional, sense perjuí de la participació de nostra alcaldessa (vice) i regidors/as en festes i tradicions d’arrelament popular o valor cultural". Esta frase, como verá, no dice nada de la presencia institucional en actos religiosos.  
La ambigüedad calculada,  la media verdad,  pueden ser unas de las razones que explican la poca credibilidad del partido y el ajustado resultado obtenido en las urnas. Los juicios de valor que usted hace sobre mí ya me parecen un poco más atrevidos por su parte. "Como socialista que es, deja mucho que desear porque está muy lejos de la dirección de su partido". Me imagino que no lo dirá por mis opiniones escritas y radiofónicas. ¿De qué dirección habla? Veamos  unos  titulares: "El PSOE promueve en el Congreso la regulación laica de los actos de Estado". "El actual líder del PSOE tiene ya decidido incluir  en el programa electoral la supresión de la “X” de la Iglesia en la declaración de la renta". "Los socialistas preguntarán en el parlamento, por la bendición, según el rito católico, de la nueva sede de los Juzgados de Santoña, en concreto si este hecho es "respetuoso" con el principio constitucional de aconfesionalidad del Estado"."El PSOE exige que Wert explique en el  Congreso el  curriculum  de Religión. Para los socialistas, supone atentar "frontalmente" contra la neutralidad de un Estado aconfesional". Todo esto son consecuencias del programa electoral a las generales para 2011, que decía: "2.6 Reformas para profundizar en la laicidad del Estado español.  La laicidad del Estado es consustancial a la idea de libertad e igualdad.
La inmensa mayoría de los ciudadanos ama la libertad personal frente a imposiciones religiosas. Aprecian que la laicidad constitucional es una garantía para la libertad individual y un principio que favorece la convivencia de ciudadanos iguales con creencias diversas. Es una laicidad positiva. En nuestro país junto a un proceso notable de secularización y disminución de la práctica religiosa tradicional se ha producido un incremento cuantitativo y cualitativo de la diversidad religiosa, lo que implica cambios en la vida y en las tradiciones culturales de nuestros pueblos y ciudades y también políticas públicas no exentas de controversia y contradicciones. Esta diversidad de identidades es un hecho característico de la mayor parte de los países europeos en lo que constituye uno de sus desafíos mayores: cómo construir cohesión social, cultural y política del país a partir de la diversidad, cómo construir una idea de ciudadanía común en nuestras democracias y cómo evitar derivaciones hacia el extremismo que constituyen una amenaza para la igualdad de género, los derechos individuales y la democracia. La separación entre Estado y confesiones religiosas, es una medida positiva de fomento del pluralismo religioso y de la libertad de no profesar religión alguna. En este terreno proponemos las siguientes medidas: democracia - 122 - Aseguraremos la neutralidad religiosa en los espacios y actos públicos, puesto que el Estado tiene el deber de garantizar que en los espacios tutelados por los poderes públicos no exista confusión entre lo público y lo religioso. Suprimiremos los privilegios que se conservan en la legislación hipotecaria en beneficio de la Iglesia Católica".
Después de leer estos titulares  y los puntos del programa electoral municipal  y  de las Generales 2011. ¿Quién está desfasado o incumpliendo? Y lo más triste es que  esta pantomima ambigua se hace para  conseguir unos pocos votos y  un jornal seguro, pisoteando las ideas, los valores y los principios. Cambio. ¿Hacia dónde? Porque si yo represento al paleolítico, ¿De qué época es la foto de la presidencia política en  la procesión de San Bernat? Ni del  nacional catolicismo cuando el PSOE estaba en la clandestinidad por defender ¿Qué?. Si pertenezco al "dinosaurismo" ¿Quiere  decir que los dos señores y las dos señoras socialistas de la foto representan los "nuevos tiempos y las nuevas ideas" del socialismo alzireño? Es  una imagen más propia de los 40-50. En ese caso,  yo  regreso  a la edad de piedra  a buscar  el nuevo y buen fuego. Pero como estoy convencido que lo más progresista,  actual y de futuro  es, primero, cumplir el mandato constitucional de ser un "Estado aconfesional" y lo segundo,  avanzar hacia un estado laico, también me quedo, opino, discrepo y pongo en cuestión un liderazgo tibio y populista.  Justificar esta decisión escudándose en "tradiciones de arraigo popular y de valor cultural" es ayudar a perpetuar, desde  el ser  autoridad, la función narcotizante de la religión, sobre las capas más sencillas, que la derecha conservadora siempre ha utilizado, además de no cumplir con nuestra Constitución. Es una pena que el Tripartito no haya sido capaz de ponerse de acuerdo en esta decisión. Todos unidos hubiera sido más coherente  y mejor comprendido por la ciudadanía.