Restaurado el reloj del campanario de los Santos Juanes de Cullera

Viernes, 5 de diciembre de 2014 | e6d.es
• Durante la semana del 1 al 5 de diciembre y tras un cuidado proceso de restauración, el reloj del campanario de los Santos Juanes de Cullera vuelve a funcionar

._000329
Han pasado 20 años, aproximadamente, desde que este reloj dejara de marcar las horas desde la atalaya del campanario, una avería lo dejó sin funcionamiento, después vino la sustitución de sus funciones por un reloj digital y de ahí cayó en el olvido.
Con motivo de la restauración y puesta en funcionamiento del reloj de la parroquia de la Sangre de Cristo, en el Raval, se planteó recuperar también el reloj de los Santos Juanes. Este trabajo se encomendó a la misma empresa: Industrias Manclús de Rafelbunyol. De este modo, y tras la restauración del reloj de forma rigurosa y artesanal, se procedió a limpiar y adecuar el campanario, sobre todo la sala del reloj. Tras su montaje e instalación, se conectó el reloj a las manecillas de la esfera y se dejó un periodo de pruebas de 48h. para comprobar su correcto funcionamiento. Ahora, los electricistas municipales instalarán la iluminación de la esfera y el reloj volverá a estar completamente operativo.
El reloj del campanario de la Iglesia de la Sangre de Cullera es un bello ejemplar de reloj -de funcionamiento mecánico- construido por la afamada firma catalana Manufacturas Blasco de Roquetas, tal y como se puede leer en la blanca esfera del mismo.
La empresa Manufacturas Blasco de Roquetes, Tarragona, fabricó varios modelos de relojes públicos conocidos como Blasco 1, Blasco 2, etcétera, según su tamaño, el nuestro es del número 1 y con el número de referencia 1070. En un principio los relojes fueron de cuerda manual, más tarde, Francisco Tafalla, el encargado de la empresa, ideó un mecanismo que sustituyendo la rueda imperial de la marcha y acoplando un juego de piñones que aguantaban una pequeña pesa de unos 2,5 Kilogramos hacían funcionar el reloj sin darle cuerda, este sistema de piñones cargaba la pesa hacia arriba para que funcionara el reloj a través de los toques horarios y la cuerda de la sonería se cargaba mediante un motor que se accionaba a través de la rueda de horas. A esto se le llamó “remontaje eléctrico” . Esta empresa hace algunos años que dejo de existir, pero esos relojes se reparan sin ninguna dificultad, haciendo falta únicamente la voluntad de conservarlos.
Sin contar, de momento, con documentación relativa a la compra de este reloj de Manufacturas Blasco, podemos situar su fabricación entre los años 1950-1960 en base las características formales y funcionales del reloj.
Ayuntamiento de Cullera