La conselleria de Sanidad ha detectado unas 5.000 tarjetas sanitarias de residentes en el departamento de salud de la Ribera que no figuran empadronados en ningún municipio.
Se trata de una criba que la conselleria y el ministerio realizan anualmente o como mucho cada dos años, pero que coincide con el decreto del Consell que deja sin tarjeta sanitaria a los inmigrantes que se encuentran en situación irregular.
Desde el departamento que dirige Luis Rosado señalan que habitualmente se realizan comprobaciones para detectar posibles fraudes en la utilización de tarjetas sanitarias ya sea por errores, para localizar personas que han fallecido y siguen de alta en el sistema o por residentes que no tienen derecho a disponer de la tarjeta SIP (Sistema de Información Poblacional) porque no figuran como empadronados o carecen de permiso de residencia. Esos cruces de datos los realiza el ministerio con el padrón municipal o a través de Hacienda, según señalaron.
La detección de cerca de 5.000 tarjetas SIP fraudulentas se produce en un momento en el que la conselleria ha reforzado el control sobre los registros para rebajar la factura sanitaria. Carlos Alós. Leer noticia completa en Levante-EMV.