Según el PSOE de Alzira la alcaldesa ignora a la comisión de toponimia

“Con su actitud lo único que consigue es crispación y el desprecio de los alzireños”

El comportamiento autoritario de la alcaldesa de Alzira está siendo desmesurado. Ahora, una vez más, sin contar con la oposición, ni con la comisión de toponimia, le pone el nombre a una avenida de nuestra ciudad; en concreto se trata de la Avenida José Gregori, fundador de Grefusa, en la zona del Huerto de Galvañón.
Estos asuntos se deben consensuar siempre, como ha sido durante muchos años, donde los acuerdos sobre condecoraciones, reconocimientos y poner nombres a las calles, plazas o avenidas eran unánimes; pero eso pasó a mejor vida. Ahora, la Sra. Bastidas, hace y deshace a su antojo ignorando que existen otras formaciones políticas en nuestra ciudad.
He recibido una invitación para la inauguración de una avenida para el día 29 de enero, a las 12 de la mañana, y es la muestra de cómo actúa la Sra. alcaldesa, sin que el Pleno lo acuerde ella inaugura, es decir, un total desprecio a los alzireños.
Terminamos el año 2012 denunciando la conducta antidemocrática de Elena Bastidas sobre el asunto del Hort de Redal. Le instamos a que empezara el 2013 con un comportamiento más democrático, pero como solemos decir ‘a la primera cullerá mosca’.
Aguilar afirma que el comportamiento personalista de la Sra. Bastidas es muy grave, porque no consensua nada y en estos asuntos donde se premia el reconocimiento y los meritos de los ciudadanos es totalmente injusto que no consiga el respaldo unánime, como ya le ocurrió por primera vez con las medallas de oro de nuestra ciudad el pasado mes de diciembre.
Las formas en la que la alcaldesa de Alzira está gestionado los reconocimientos a los ciudadanos insignes de nuestra ciudad son totalmente antidemocráticas. Con ello, lo único que consigue es que los homenajeados no tengan la unanimidad que realmente se merecen.
Una vez más le decimos a Elena Bastidas que así no se gobierna una ciudad. Con su actitud lo único que consigue es crispación y el desprecio de los alzireños. La Sra. Bastidas es la alcaldesa de todos los alzireños y no solamente de unos cuantos.