Un grupo de sesenta mujeres de la Asociación Unión de Mujeres de Benaguasil recorrieron durante todo el día de ayer nuestro municipio, en una visita que les llevó por la mañana al edificio consistorial y al Mercado Central. A continuación, realizaron la Ruta de los Arrozales en un tren turístico hasta la Muntanyeta dels Sants.  “Estoy muy contenta porque la finalidad de crear nuevas rutas turísticas es que la gente venga a conocer nuestro municipio y nuestra gastronomía autóctona y, de esta manera, contribuya a la economía local. Creo que estamos recogiendo lo que hemos sembrado. Estamos convirtiendo en realidad nuestra ilusión, y me siento satisfecha porque esto supone una meta más conseguida, se está notando ese trabajo que hemos estado realizando durante estos años”, explicó la concejal de Turismo, Comercio y Mercados, Manoli Egea.
La primera parada de la visita fue el Ayuntamiento. Allí, el grupo de mujeres pudo contemplar las salas principales del edificio, como el salón de plenos, la sala de juntas de gobierno y el despacho de alcaldía, donde fueron recibidas por la máxima autoridad municipal, Salvador Campillo. “Hemos quedado encantadas y admiradas por el recibimiento en el Ayuntamiento, hemos encontrado a unas personas amabilísimas, tanto la guía que nos ha explicado todas las dependencias, como el alcalde, una persona muy atenta, y la concejal de Turismo, Manoli Egea. El edificio nos ha encantado porque conserva ese aire clásico y señorial”, afirmó Estrella Ortí, presidenta de la Asociación Unión de Mujeres de Benaguasil, un colectivo que aglutina a 400 socias.
A continuación, visitaron el Mercado Central donde el presidente de la Asociación de Vendedores, Salvador Celda, les ofreció una explicación sobre el embutido autóctono de Sueca. “Hablé con el presidente de la asociación  y me propuso, además, ofrecerles una degustación de nuestros productos típicos. Estoy muy contenta por el éxito de la iniciativa, ya que están encantadas”, afirmó Egea. Finalmente, el grupo de mujeres realizó la Ruta de los Arrozales subidas en un tren turístico que les ofreció una magnífica panorámica de la marjal hasta la Muntayeta dels Sants. La visita finalizó con una comida en un restaurante del municipio.