El pasado viernes, los bomberos rescataron a un niño de 12 años que cayó por un hueco del parking subterráneo que hay en el boulevard de Tulell, en concreto a la altura del número 8. Al parecer, un cristal que forma parte de un pretil o antepecho cedió, cayendo el menor desde una altura considerable. Afortunadamente, todo quedó en un susto pero las consecuencias pudieron ser graves. Hoy, cuatro días después, según podemos ver en las fotografías 1 y 2, el hueco se ha cubierto con una plancha metálica.
No es la única plancha metálica que sustituye al cristal pues, como comprobamos en las imágenes, son muchas las que se han utilizado como recurso para tapar los huecos peligrosos que están abiertos al vacío. ¿Por qué desaparecen estos cristales? Quizá al final de la lectura de esta entrada lo podamos deducir.
Tulell fue 'vendido' a la ciudadanía como una zona de expansión residencial espectacular con más de 6.800 viviendas, zonas verdes, palacio de congresos, auditorio, rascacielos, centros comerciales... La alcaldesa Elena Bastidas pretendía planificar la Alzira del futuro, todo un idilio urbanístico que ha quedado en cuna de vándalos y en un lugar calamitoso. Hoy, Tulell, es entorno 'sin ley': solares abandonados llenos de maleza, pipicanes improvisados, papeleras rotas, basura, desperdicios, pintadas, cristales rotos a pedradas, excrementos humanos, meadas, preservativos, abundancia de roedores, reptiles e insectos... todo un desorden social que nadie controla y que cada vez más favorece los actos delictivos y las situaciones de peligro.
Tulell da la sensación de que todo está permitido en este entorno, que nadie controla, que nadie se hace cargo de nada...
Ya informamos en su día sobre la "Teoría de las ventanas rotas", una conjetura que intenta demostrar a través de un paralelismo que si una zona de un pueblo o ciudad empieza a abandonarse y a no cuidarse, poco a poco se irá generando este tipo de conductas, en especial el vandalismo.
La mayoría de ayuntamientos conocen muy bien esta teoría o, por lo menos, deberían tenerla en cuenta. Mantener la ciudad limpia, arreglar los problemas cuando aún son pequeños y no descuidar ningún rincón de los barrios o zonas más conflictivas, son acciones muy importantes que contribuyen al buen orden ciudadano y, por tanto, a evitar el vandalismo y contextos de peligro.
En la Ley 7/85 de Bases de Régimen Local se determina una serie de competencias de los municipios; entre otras, seguridad en lugares públicos, salubridad pública o disciplina urbanística... obligaciones que, ni por asomo, se cumplen en Tulell.
E6D
El Tulell de Bastidas (30 - diciembre - 2014)