En la asamblea ciudadana que se realizó previa a la sesión ordinaria del Pleno del Ayuntamiento de Alzira del 30 de septiembre de 2015, tomó la palabra, entre otros, una vecina de la calle Luchana para mostrar su malestar por la situación y los problemas de convivencia que hay en el barrio de l’Alquerieta. Se quejaba, entre otras cosas, de “caballos atados a las rejas de las ventanas o sillones que se sacan por la noche a la acera y luego no se retiran durante el día” y señaló dirigiéndose al equipo de gobierno que “igual que lo veo yo ustedes también lo ven. Espero que hagan algo” calificando de “infierno” vivir en esa calle, señalando que “nosotros nos iremos y oros se quedarán, pero el problema lo tendrán ustedes”.
Diego Gómez, alcalde de Alzira, señaló que la problemática ya viene de antiguo y señaló que, desde el equipo de gobierno, tratan de buscar una solución “que no sea puntual sino integral” y señaló que tanto la Policía Nacional como la Policía Local son conocedoras de la problemática, además de estudiar el tema de las viviendas deshabitadas.
Finalmente, esta ciudadana retó al equipo de gobierno señalando que “yo les cambio mi casa por la de cualquiera de ustedes durante un mes… y el que tenga lo que tenga que tener que aguante”.
 
 
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