Las películas pornográficas no suelen destacar por la construcción de personajes complejos ni por tramas profundas. Tampoco se les exige. Esto no quiere decir que los actores del cine X no sean polifacéticos y capaces de adaptarse a otros géneros, vésae el caso reciente de Sasha Grey así como de otros compañeros de profesión que dieron el paso al «cine con ropa».
Menos conocido pero no menos interesante es el trabajo de aquellos encargados de doblar o de dar los últimos efectos sonoros a las cintas eróticas. En el vídeo que compartimos os mostramos el curioso proceso de doblaje y de grabación de los momentos más álgidos de estas historias. Una labor parecida a la que en su día llevó a cabo Santiago Segura, quien ha reconocido en muchas ocasiones sus inicios como doblador en este cine.