La apisonadora

Esperemos que el gobierno de este país llamado España despierte de su letargo y reaccione aplicando las leyes que todo ciudadano debe cumplir

 Hartos de la apisonadora independentista, la mayoría silenciosa ha dicho: “basta ya”, basta de adoctrinamiento, basta de manipular la historia, basta de mentir al pueblo al que se debe. Vargas Llosa dijo: “la razón es barrida por la pasión”. “Y es verdad que la pasión puede ser generosa y altruista cuando inspira la lucha contra la pobreza y el paro. Pero la pasión puede ser también destructiva y feroz cuando la mueven el fanatismo y el racismo”, sentenció el escritor, que calificó al nacionalismo como “la peor de todas” las pasiones y como una “religión laica, herencia lamentable del peor romanticismo”.
Hace poco vimos como un dictador hizo una Constitución a su medida bajo la bandera de la democracia, para perpetuarse en el poder, encarcelando a todos sus opositores y haciendo que un país riquísimo malviva del estraperlo. Este es el camino que esta apisonadora antisistema parece seguir: ya ha conseguido bajar su PIB, al abandonar esta rica tierra un número importante de empresas, tanto nacionales como internacionales.
¿Hasta cuándo va a durar esta “sinrazón”? Esperemos que el gobierno de este país llamado España despierte de su letargo y reaccione aplicando las leyes que todo ciudadano debe cumplir.