La Guardia Civil desmantela un grupo especializado en estafas por el timo de “La Estampita”
Lunes, 2 de marzo de 2015 | e6d.es
• Han sido detenidas dos personas e imputadas otras cinco por la comisión de hasta 45 delitos
La Guardia Civil ha detenido a dos personas e imputado a otras cinco más como integrantes de un grupo delictivo especializado en cometer estafas, utilizando el método del timo de la estampita, actuando en varias provincias del territorio nacional, esclareciéndose un total de 45 hechos delictivos de los que 32 son delitos de estafas.
El Equipo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Manzanares, iniciaron en el mes de octubre del pasado año la denominada operación “Timoti”, tras detectarse un resurgimiento de delitos de estafa por el método del timo citado con anterioridad en las localidades de La Solana, Daimiel y Bolaños de Calatrava.
Tras las primeras indagaciones, junto con las manifestaciones de las víctimas y testigos de estos hechos delictivos, en combinación con un análisis detallado de las bases de datos del Cuerpo además de las múltiples gestiones practicadas, se pudo determinar que se trataba de un grupo organizado, los cuales actuaban a nivel nacional.
Los investigadores realizaron una exploración sobre los posibles autores de estas estafas, siendo identificados los miembros del grupo tras una laboriosa y ardua búsqueda además de un exhaustivo filtrado de personas que habitualmente negocian vendiendo joyas en establecimientos especializados, pudiéndose localizar el domicilio de los mismo al cual regresaban después de cometer los hechos ilícitos.
El pasado día 9 de febrero, se monto un operativo, para la fase de explotación de la operación “Timoti”, el cual dio como resultado la detención de los dos integrantes del grupo, P.M.L., 55 de años de edad, vecino de Colmenar Viejo (Madrid) y A.S.R., 44 de años de edad, vecino de Casarrubios del Monte (Toledo) como presuntos autores de los hechos.
Así mismo se procedió a la imputación de A.S.G., de 21 años de edad y vecino de Casarrubios del Monte (Toledo); G.C.L.L., de 54 años de edad, vecino de Cariño (La Coruña); J.C.P.A., de 52 años de edad, vecino de Madrid; P.G.C., de 23 años de edad, vecina de Guadalajara y F.J.G.H., de 50 años de edad, vecino de Segovia.
Se realizaron dos registros domiciliarios, uno en la localidad de Colmenar Viejo (Madrid) y el otro en Casarrubios del Monte (Toledo), en los cuales se recuperaron joyas robadas a las víctimas junto con dos escopetas, tres alargadores de cañón, cartuchos y postas, dos pistolas, una carabina, catorce teléfonos móviles dos navajas, un pasamontañas y el vehículo empleado para cometer los hechos ilícitos.
El modus operandi de esta organización criminal consistía en desplazarse desde el centro del país hacia provincias de toda España en un vehículo de alta gama con las lunas tintadas, para una vez en la zona donde tenían fijados los objetivos donde cometer las estafas, abordar a personas, principalmente de avanzada edad intentando engañarles con el “Timo de la Estampita”, consiguiéndolo en muchos casos. En otros casos, cuando eran descubiertos por la víctima, utilizaban la violencia e intimidación, amenazas para detener ilegalmente a la persona al objeto de conseguir el dinero, por lo que a los detenidos, además de los 32 delitos de estafa cometidos, se les imputa también los delitos de tenencia ilícita de armas, falsificación documental, daños, usurpación, apropiación indebida, detención ilegal, amenazas, coacciones y organización criminal, habiéndose esclarecido un total de cuarenta y cinco delitos a nivel nacional, obteniendo un montante económico de 106.000 euros.
Timo de la estampita
La víctima es abordada por un estafador, supuestamente mermando de facultades mentales. El estafador lleva consigo un sobre lleno de billetes, a los que no da ninguna importancia, tratándolos como estampitas. Entonces entra en escena un segundo timador (el gancho), que convence a la víctima para que juntos engañen al disminuido ofreciéndole una pequeña cantidad de dinero por sus estampitas. Después de entregar el dinero, la víctima recibe el sobre, pero cuando lo abre, en lugar de encontrarse los billetes, encuentra recortes de papel, ya que han hecho el cambiazo de forma imperceptible para la víctima (requiere de una cierta habilidad). Para ese momento, los estafadores ya están demasiado lejos, y la víctima ha perdido su dinero.
Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Almagro (Ciudad Real).