Si hay un mueble que todos conocemos y que seguro alguien cercano a nosotros la disfruta, esa es la mecedora de rejilla. Algún antepasado la tuvo y casi todos nos hemos balanceado en ella. Pero, ¿de dónde procede su singular diseño? Su fundador y creador fue Michael Thonet, él se debe la curvatura de la madera en producción industrial y también la definición de ‘estilo Thonet’ y mecedora Thonet.
Michael Thonet nació en Boppard en 1796 y se le puede considerar como el gran creador de las técnicas del curvado de madera. Tras más de diez años de intento y estudios eligió para sus asientos la madera de haya, cuya fibra larga y recta sometía primero a un baño de vapor para forzarla después en prensas de bronce -diseñadas por el propio Thonet- y, por último, la dejaba enfriar poco a poco. Un tratamiento que permitía conservar indefinidamente la forma conferida a la madera sin riesgo de alteraciones por el paso del tiempo, lo que le proporcionaba una extraordinaria robustez.
La producción de las sillas se realizó desde el primer momento a escala industrial. A los tratamientos para moldear la madera les siguieron las operaciones de pulimento, teñido y montaje realizado sólo con tornillos. Otra de las características de las sillas y mecedoras Thonet es la adopción de la rejilla para los asientos.
Tras obtener la patente fundó en 1837 su primera fábrica en Eslovaquia, país que disponía de la mayor calidad de haya conocida. Fueron sumamente célebres las mecedoras con estructuras en espiral, así como sillas y percheros conocidos como gama vienesa, pues la capital del imperio austrohúngaro fue uno de sus centros de mayor difusión. Gran éxito cosechó su colección con motivo de la Exposición Universal de Londres, en 1851, y ya en 1860, Michael Thonet, diseña su primera mecedora a la que se considera su obra maestra y que es la precursora de las actuales mecedoras de todo el mundo.
La producción de sus productos fue creciendo de manera espectacular hasta el punto que, a principios del siglo XX, empleaba a más de cinco mil trabajadores capaces de fabricar cuatro mil muebles al día.
La producción de estas sillas, percheros y mecedoras continúa hoy en día y sus factorías siguen proporcionando, con éxito, los modelos diseñados por su fundador.
Hay que lamentar la producción fraudulenta realizada por los países asiáticos, que ni están realizados en madera de haya ni tampoco tienen el copyright para producirlas. Es por ello que estas mecedoras de nuestros antepasados son las auténticas, importadas por un distribuidor de Barcelona y luego la mayoría llegaron por tren a los hogares valencianos.
Dale una segunda oportunidad a tu mueble Thonet y recupera su uso porque ¿hay algo más valioso para un objeto que su propia historia?