• Siempre amenazó con irse de la Selección de Chile si no le aumentaban aún más su suculento sueldo
Jorge Sampaoli está próximo a debutar en España en un partido oficial dirigiendo a su nuevo club el Sevilla, ante Real Madrid. El entrenador de innegables méritos en su actividad, como que hizo maravillas con la Selección Chilena de fútbol mientras ella estuvo a su cargo, se vio envuelto durante su desempeño en una serie de anormalidades. Teniendo contrato vigente hasta el Mundial de Rusia 2018, si es que Chile clasificaba bajo su mando, constantemente amenazaba con irse si no le aumentaban aún más su suculento sueldo.Finalmente abandonó igualmente al equipo nacional de Chile algunos meses antes de la Copa América Centenario que se desarrolló en los Estados Unidos y ahora cumple uno de sus sueños, entrenar en una Liga de primer nivel en Europa. Lo llamativo es que apenas asumido en el plantel sevillano se produjo la vacante en el cargo de entrenador de la Selección Argentina y surgió su nombre como favorito para asumirla. Entonces instó a viajar a España a su abogado residente en Buenos Aires y jugó a dos bandas. El profesional de las leyes pregonaba a los cuatro vientos que su representado necesitaba libertad de acción para hacerse cargo del equipo nacional de su país, mientras con justificada razón la institución que acababa de contratarle se negaba y exigía el cumplimiento del contrato recién firmado. Ante hechos consumados, Sampaoli hizo como que separaba aguas de su colaborador diciendo que "sería una irresponsabilidad que yo no siguiera en Sevilla". Por todo lo anterior me permito traer al recuerdo mi entrada que se publicó a mediados de 2015 en plena Copa América, la que finalmente fue ganada por Chile.
Insólito: Sampaoli aprueba la indisciplina Chile futbolizado por la Copa América, vive la conmoción de un hecho repudiable. Arturo Vidal, su máxima figura en la actual competencia y goleador del equipo, repitió uno de sus actos de indisciplina que datan de anteriores convocatorias, con agravantes indudables. En las horas libres que le otorgó al plantel su técnico Jorge Sampaoli, el futbolista concurrió a un Casino de juegos cerca de la ciudad de Rancagua, en compañía de su esposa. Volvieron, manejando él su Ferrari, con la intención de reintegrarse el deportista al lugar de concentración del llamado "equipo de todos", antes de las 23, hora tope en la autorización del entrenador. Pero hubo un "pequeño" detalle. En estado de ebriedad, Vidal, a una velocidad que según testigos alcanzaba los 160 kilómetros por hora, embistió a un coche que le precedía. Afortunadamente no hubo desgracias personales que lamentar, salvo lesiones leves de Vidal, su mujer y el conductor del auto chocado, vehículo que volcó a raíz del impacto. Después del suceso, al aparecer la policía en el lugar, hay una grabación en que en medio del procedimiento correspondiente de los que en Chile llamamos Carabineros, Vidal amenazó a la autoridad y le dijo que no lo esposara, porque si lo hacía "estará cagando a todo Chile" en referencia a su labor en Copa América. Este es un resumen de la historia previa a las resoluciones que hace poco adoptaron tanto la justicia oficial como la "justicia" deportiva. La oficial abrió un juicio de 4 meses en que Arturo Vidal deberá firmar habitualmente en el Consulado de Chile en Milán (juega en Turín) mientras dure el procedimiento legal. Además, obviamente fue suspendida su licencia de conducir. La "justicia" deportiva, en decisión del Director Técnico, sencillamente fue pasada por alto. No importa que cada futbolista seleccionado sea ejemplo para niños y jóvenes, tampoco importa que en lugar de presenciar por televisión el encuentro entre Argentina y Uruguay, como lo haría cualquier jugador seleccionado responsable, haya faltado a la confianza de la gran mayoría de los habitantes del país y "pasado de copas", cometido luego la irresponsabilidad de manejar, además acompañado de su esposa.
¿Qué dijo Sampaoli? Contrariamente al técnico anterior Claudio Borghi, quién por mucho menos expulsó de la Selección a varios jugadores, INCLUIDO VIDAL, se limitó a deplorar el hecho, entre una confusa explicación, en que solamente quedaba en claro que privilegiaba la calidad como futbolista del afectado. Inexplicable. Desde hoy habrá que convenir que para la Dirección Técnica del fútbol chileno, todo es válido, aunque antes hubiera marginado cierta vez a Charles Aránguiz por haberse quedado dormido y no llegar a un entrenamiento. Hoy la Selección Nacional, el "equipo de todos" aprobó por medio de su cabeza, la indisciplina y el desapego a millones de hinchas, excluyendo a los grupos que fueron a vitorear a Vidal al Juzgado como si hubiera hecho una hazaña. Desde ahora cualquier acto de indisciplina será legítimo en el equipo de Sampaoli, porque en este caso no cabía más que la expulsión inmediata de Vidal desde el plantel. Pero claro, hay que ganarle el viernes a Bolivia y, entonces, todo vale.
Agregado 4 horas después Sorprendentemente en nuestros medios de comunicación, hay quienes defienden a Vidal con el argumento de que todos en nuestras horas libres podemos hacer lo que queramos.Claro que la ley no permite conducir ebrio aunque sea en las horas francas. Además, si Vidal hubiera tenido la fortuna de no chocar, habría llegado ebrio al lugar de concentración del equipo. Por ese hecho a él mismo y a otros hace años, el entonces entrenador los despidió de inmediato sin importar las consecuencias "deportivas". Si esta vez hubiese sido así, dada la actitud de Sampaoli, evidentemente que se habría tapado. Nadie fuera de Pinto Durán lo sabría.
Esteban Lob
* Esteban Lob es un comentarista de fútbol chileno que colabora en el apartado temático “Clan de fútbol” de El Seis Doble. * Esteban Lob es autor del blog “Esteban Blog”