Los votantes han querido reconocer que, a lo largo de este año de legislatura, no ha adoptado ni una sola medida para recuperar el deterioro que el Gobierno del que forma parte ha producido en algunos de los ámbitos más sensibles de la protección social. Mientras todo se recupera en España, no se ha adoptado ninguna medida para recuperar el destrozo en servicios sociales por parte del Gobierno. Insumisa, desleal con las CC.AA. y las entidades locales, insensible e incapaz de comprender el sufrimiento de las personas en situación de dependencia y de sus cuidadores (casi siempre cuidadoras), son títulos más que suficientes para que, en un solo año, se merezca el apreciado premio Corazón de Piedra 2017.
Es la segunda Ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad que logra este galardón, tras Ana Mato, en 2013, consolidando así una triste trayectoria de insensibilidad al frente del que debería ser el Ministerio más social dentro del Gobierno.
En un segundo lugar, con un meritorio 32,5%, ha quedado Equipo Económico de Ciudadanos (Cs); uno de cada tres votantes ha percibido que existe un núcleo duro dentro del Partido que, a la hora de la verdad toma las decisiones importantes y estas no son siempre las predicadas en el programa electoral o en el discurso público. En reconocimiento a este ultraliberal corazón que late en el pecho de la cúpula estratégica de Ciudadanos, un corazón insensible ante las personas y familias más necesitadas, un corazón duro, un corazón con forma de celdas de Excel, han resultado segundos en la votación del preciado galardón, quizás porque todavía no han tenido oportunidad de exhibir en labores de Gobierno la dureza de su corazón, pero evidenciando que son una alternativa real para este galardón en un futuro próximo.
Por último, solo uno de cada cinco votantes (19.1%) ha reconocido los méritos de Soledad Becerril Bustamante, ex Defensora del Pueblo (es un decir), que ha quedado así en tercer lugar. Quizás le ha restado votos su labor tan callada, ya que muy callada estuvo ante el sufrimiento de quienes fueron desamparados en los años tan duros de la crusis, durante los años de plomo de los recortes en las polìticas sociales que han causado mayor sufrimiento, e insensibilidad, incluso ante la utilización de la pobreza como espectáculo vergonzante. Méritos que avalan la callada labor de esta marquesa, que ocupó un puesto que dicen que fue de Defensora del Pueblo, y que, sin duda, hubiera merecido mayor reconocimiento por la dureza e insensibilidad de su corazón.
El premio Corazón de Piedra
Fue instituído por la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales para reconocer a las personas que muestren mayor insensibilidad y cuyas opiniones o actuaciones produzcan más desamparo y sufrimiento a las personas y familias, especialmente en situaciones tan graves como las que estamos viviendo. Es la quinta ocasión en la que se entrega. La primera en recibirlo fue Ana Mato, siendo Ministra de Sanidad y Servicios Sociales en 2013; la sucedieron María Dolores de Cospedal, Presidenta de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en 2014, Mariano Rajoy. Presidente del Gobierno de España en 2015, y los 36 ayuntamientos mayores de 20.000 habitantes “pobres en inversión social” en 2016
La Asociación solicitará esta misma semana a la Ministra una entrevista para hacerle entrega personalmente del galardón, que consiste en un trofeo que simboliza un corazón de piedra, y un diploma acreditativo. Los otros dos candidatos recibirán, a su vez, un diploma acreditativo de su participación y de los votos obtenidos.
El Seis Doble | Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales