La
hambruna en Sudán del Sur es una amenaza real para unos 235.000 niños con desnutrición aguda grave, víctimas inocentes del conflicto que sufre este joven país desde finales de 2013. Si no reciben tratamiento pronto, unos 50.000 niños menores de 5 años podrían morir por desnutrición aguda grave.
Por otra parte, hay más de 1 millón de niños refugiados y desplazados internos, unos 400.000 no pueden ir a la escuela y unos 12.000 reclutados por grupos armados de ambas partes. Necesitan nuestra ayuda.
El trabajo de UNICEF para evitar una catástrofe humanitaria
UNICEF trabaja en Sudán del Sur desde 1989, actualmente con un equipo de más de 150 profesionales en las distintas áreas de trabajo. En 2014 se han conseguido los siguientes resultados para atender las necesidades urgentes de los niños y sus familias en Sudán del Sur:
Nutrición: más de 80.000 niños menores de cinco años han sido admitidos para ser tratados contra la desnutrición aguda grave y unos 78.000 niños han recibido suplementos de vitamina A.
Agua, higiene y saneamiento: más de 448.000 desplazados internos tienen acceso a agua potable y más de 247.000 disponen de instalaciones de saneamiento adecuadas.
Salud: se ha vacunado a más de 658.000 niños contra el sarampión y a 587.000 contra la polio, y se han suministrado más de 667.000 mosquiteras tratadas con insecticida para luchar contra la malaria.
Protección: casi 68.000 niños han recibido apoyo psicosocial y 6.693 niños que estaban solos han sido
identificados, de los que 403 ya están con sus familias de nuevo.
Educación: más de 50.0000 niños de entre 7 y 18 años reciben educación en emergencias, incluyendo material escolar. Además, la iniciativa de Vuelta al cole rehabilitará 225 aulas dañadas y proporcionará acceso a la educación a los aproximadamente 400.000 niños obligados a abandonar sus escuelas.
Junto con el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y otras organizaciones, puesta en marcha de 34 Misiones de Respuesta Rápida, con las que se ha llegado a más de 590.000 personas, incluyendo 125.000 niños menores de cinco años, con servicios y suministros que salvan vidas. Leer noticia completa en unicef.es.