Un niño de cinco años ha decidido que, después de jugar y compartir bromas con su mejor amigo, ahora ha llegado el momento de apoyarle en una difícil batalla. El pequeño Zac Gossage padece leucemia y Vincent Butterfielfd decidió mostrarle su cariño de la mejor forma que se le ocurrió: afeitándose la cabeza.
"Lo hice para que no sintiera que él es el único sin pelo", dijo Vincent, que desde que conoció la noticia ha estado informándose sobre los cambios que está sufriendo Zac y ha empezado a vender bufandas para recaudar dinero que permita pagar el tratamiento que el pequeño necesita.
Quizá Vincent es aún demasiado pequeño para comprender lo impactante que resulta que un niño de su edad se vuelque así con una enfermedad. Para él, la amistad es solo "algo bonito", según recoge The Telegraph. Fuente información: antena3.com.