Una entrega de tierras alegre y triste en Guatemala

En 2011, en el Valle de Polochic -Guatemala-, fueron expulsadas violentamente de sus casas 769 familias

Son las cinco de la mañana y empezamos nuestro viaje desde la Ciudad de Guatemala hacia la finca de Sactelá, donde se encuentran las tierras. Partimos con una furgoneta con algunos dirigentes del Comité de Unidad Campesina (CUC), acompañados por el personal de Oxfam Intermón y otros compañeros y compañeras de distintas regiones de Guatemala.
A las 10 de la mañana hacemos la primera parada a Tamahú. Allí nos encontramos con otros autobuses y camionetas ocupadas por las 110 familias que ese día dormirían en sus nuevas casas. Vienen de lejos y llevan consigo todo el polvo que se ha levantado por el camino. El sol ya es fuerte y la aglomeración de gente dentro de los vehículos acentúa la sensación de calor. Llevan carteles que recuerdan que aún quedan 629 familias sin casas. Reina el silencio y  los saludos son breves.
Retomamos todos juntos la marcha hasta Tactic donde la gente espera emocionada. Hablan las mujeres de la comunidad recodando el sufrimiento padecido por las familias en el momento del desalojo, hace ya tres años.
Antes de comer hacemos algunas paradas más en distintos pueblos y comunidades donde los dirigentes del CUC y los representantes comunitarios van recordando los muertos y desaparecidos durante los tres años de conflicto.
En torno a las 13.30h, la Secretaria de Asuntos Agrarios comienza a repartir la comida a todas las familias. El escenario está excesivamente preparado para el acto institucional de la jornada. Las familias, por su parte, se mantienen respetuosas, comiendo en pequeños grupos y a la expectativa de los actos.
Empiezan los parlamentos de los representantes municipales, del departamento y del gobierno; seguidos por los representantes de las comunidades y del CUC. Los primeros destacan toda la ayuda institucional que se ha puesto para conseguir estas tierras y estas casas. Los segundos subrayan el incumplimiento del compromiso del Gobierno ya que las condiciones de las viviendas otorgadas no son las prometidas (falta agua potable, electricidad, letrinas, buena accesibilidad y dotación económica para el proyecto productivo); también hacen un recordatorio especial para todas las familias que aún esperan sus casas y tierras. Leer noticia completa eldiario.es.