Unicef está ampliando su asistencia de emergencia ante el conflicto de Siria, ya que el número de niños y familias sirias que llegan a Jordania para refugiarse de los ataques está aumentando notablemente.
Según informó este lunes Unicef, la organización está proporcionando apoyo esencial en la nueva zona de acampada de Za'atari, cerca de Mafraq, en el norte de Jordania, que, según las previsiones, recibirá a 5.000 refugiados sirios en los próximos días.
Unicef, junto a la Agencia Federal Alemana de Ayuda Técnica (THW), ha prestado apoyo para mejorar las infraestructuras de agua, saneamiento e higiene del campo y así poder hacer frente a las necesidades humanitarias urgentes.
Actualmente, ya se han instalado bidones de membrana de agua, 80 wc portátiles y 80 duchas, que pueden dar servicio a unas 5.000 personas. Los tanques de agua se montarán en cuanto los refugiados lleguen al campamento.
Asimismo, la organización ha proporcionado suministros adicionales de emergencia para atender las necesidades iniciales de 25.000 personas, incluyendo kits básicos de agua para familias, tiendas para levantar ‘espacios amigos de la infancia’, lonas, esteras de plástico y otros artículos de emergencia.
El portavoz de Unicef Jordania, Dominique Hyde, indicó que “estamos siendo testigos de un movimiento a gran escala de niños y familias a lo largo de las fronteras sirias del sur hacia Jordania, que está creando una crisis humanitaria".
"Más de la mitad de todos los desplazados sirios son niños y adolescentes, quienes aún tienen que soportar angustia psicosocial tras haber sufrido la violencia y el desplazamiento. Estamos viendo un recrudecimiento del número de mujeres que llegan con sus niños”, concluyó.