Creo que todos los votantes teníamos claro los distintos partidos políticos que se presentaban en las pasadas elecciones en Alzira. A saber: Compromís, PP, PSOE, EU, Ciudadanos, Podemos, Som Valencians, FE de las Jons y Vox. Creo que no me dejo ninguno, ¿verdad? Pues no era así. Ahora resulta que no eran partidos políticos los que se presentaban, sino dos bloques: izquierdas y derechas.

En eso que llaman ‘Pacte de la Vila’ la emperatriz Aguilar lo dice bien claro: “l’esquerra ha guanyat un regidor a la localitat, gràcies als nostres programes molt similars”. Es decir, la cosa iba de izquierdas y de derechas.

Da lo mismo que durante las últimas elecciones el PSOE de Alzira se publicitase con frases como “Ara és el moment d'Isabel Aguilar”, eso ¡bah!, da lo mismo, el momento podía ser de Aguilar como de cualquiera del bloque de las izquierdas.

También da lo mismo que el PSOE dijese en campaña “Isabel Aguilar alcaldessa”… Seamos sinceros, la chica tampoco quería ser alcaldesa, con que lo fuera alguien del bloque de izquierdas era suficiente. 

Y, finalmente, tampoco es significativo que dijesen “Vota PSOE”, cuando lo realmente importante era votar al bloque de izquierdas y no al PSOE. Al fin y al cabo, salvo alguna palabra sinónima, todos llevaban el mismo programa.

Parece que lo que se proponía Aguilar, es decir, el PSOE, es decir, el bloque de izquierdas ha salido bien y mantienen la alcaldía. Da lo mismo que EU haya desaparecido o que Compromís haya ganado 3 concejales más de los que tenía y que el PSOE haya quedado como una escombrera política obteniendo el peor resultado de toda su historia, perdiendo votos y concejales. Todo eso, para ‘la emperatriz’, es un triunfo, porque el bloque de izquierdas ha ganado un concejal. Pues siendo así habrá que felicitarla: enhorabuena señorita Isabel Aguilar, por los resultados obtenidos en las últimas elecciones municipales.

Yo imagino que, a este paso, en un par de elecciones más, el PSOE deberá cerrar la sede y trasladarse a la de Compromís, así podrían compartir gastos. 

Otra cosa que no habíamos visto en Alzira es que el número 2 ha tenido que dimitir para que entre el número 4. También ha ocurrido en el PSOE (este partido parece ‘el pupas’…, pierde votos… concejales… saltan números para que entren otros…), para meter con calzador a Pascual por su “verdadera experiencia política”. Sinceramente, espero que estas cosas sólo pasen en política, porque, aunque sea un mito y, quizá, el jugador más grande de la historia del Valencia CF, no me gustaría que para la próxima temporada fichasen a Kempes con el diez a la espalda.

Y, finalmente, ¿qué pasa con el título de vicealcaldesa? ¿Era un cargo necesario o un capricho de ‘la emperatriz’? Porque ella no podía ser solamente concejal como cualquier otro, ella tenía que ser ¡vicealcaldesa!, que es probable que algunas atribuciones especiales tuviese. Pediría a la oposición que esa fuera la primera pregunta que hicieran al equipo de gobierno o a ‘la emperatriz’: ¿podrá funcionar Alzira sin vicealcaldesa? Os observo. 
 
 

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