Durante toda esta semana, se están llevando acabo los trabajos de tratamientos preventivos de los pinos públicos del viario urbano. Estos trabajos se enmarcan dentro del Programa de Control de la Plaga de la Procesionaria del pino que están llevando a cabo por la empresa Biottec Control de Plagas, la misma que establece la programación de desinfección, desratización y desinsectación en la red de alcantarillado público, instalaciones, dependencias y edificios municiplaes.
Aprovechando que esta semana las condiciones climatológicas han dado una tregua se ha establecido un calendario de trabajo. Los pinos que se es están tratando son todos los de la Plaça de la Constitució, Sanchis Guarner, los de la carretera CV-605, Avda. de la Azud, Passeig El Pla, todos los del Azud, los del Cementerio y los de la mota del rio.
El objetivo de realizar los tratamientos en el mes de noviembre es para prevenir que en febrero o marzo existan orugas que abandonen el pino para dirigirse al suelo hasta que finalmente se entierran en la tierra. Este espectáculo de la naturaleza en ver desfilar a las procesionarias, que resulta divertido para los niños y lo que les gusta a los perros que las olisquean o lamen; pero los diminutos pelos de la oruga procesionaria pueden producir dermatitis, lesiones oculares y fuertes reacciones alérgicas, asfixia o urticaria y en casos más graves, incluso puede producir reacciones anafilácticas que requieren tratamiento con corticoides.
Para combatir la procesionaria se están realizando dos tipos de tratamientos, endoterapia con un producto fitosanitario en aquellos pinos más complicados de tratar por su ubicación así como en la mayoría de los pinos ubicados en el casco urbano. El resto de pinos situados en el viario urbano están siendo tratados mediante la aplicación de un insecticida biológico por pulverización.
La Endoterapia es un tratamiento que funciona a partir de la capacidad de flujo de savia que hay en el interior de los tejidos vasculares (básicamente xilema). El flujo de savia viene determinado en función de dos parámetros: la transpiración y la capacidad de intercambio osmótico en las raíces; por lo tanto, cuando tengamos estas dos variables en funcionamiento, el tratamiento funcionará al máximo.
Y los pinos que se pulverizan, que como hemos mencionado anteriormente es un insecticida biológico que se utiliza el "bacillus thuringiensi", que es una bacteria que ataca al sistema intestinal de la oruga, paralizando así las mandíbulas y el tracto intestinal, produciendo el cese de la alimentación. Para alcanzar las partes altas de los pinos se utiliza una grúa que permite rociar el producto contra los árboles, utilizando un equipo a presión que llega hasta los veinte metros.
La procesionaria afecta principalmente a todos los géneros de pinos presentes en la Península Ibérica aunque sienten predilección por especies exóticas como el pino laricio, el canario o el silvestre. Se hace necesario su control ya que la procesionaria constituye la primera plaga forestal española pudiendo suponer también un problema de salud pública por las reacciones alérgicas que puede provocar tanto a los seres humanos como a las mascotas.