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Tiene alarma, pero... ¿está realmente protegido?
Segurinter estudia los puntos débiles de su hogar, negocio o empresa a fin de instalar el tipo alarma y sensor adecuado a sus necesidades
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Tener una alarma en su casa o empresa no significa que está realmente protegido. Esto es algo que la mayoría de las personas no saben. Todos queremos estar protegidos y sentirnos seguros en nuestro hogar o en nuestra oficina, por eso tenemos un techo para cuando llueve, calefacción para cuando hace frio y persianas para tener intimidad, y todos estos elementos cumplen su función. Pero, ¿qué pasa si alguien intenta forzar su entrada? También queremos disponer de un sistema que lo detecte a tiempo y avise de que estamos sufriendo un robo, esto lo saben los ladrones y saben que no todas las alarmas funcionan igual de bien y que depende de qué empresa la haya instalado será más fácil o más difícil evitarla.
Entornos diferentes, soluciones diferentes
Cada entorno: un piso, un chalet, un comercio o una industria son diferentes y tienen diferentes necesidades de protección. Un único modelo de alarma no puede ofrecer la seguridad más adecuada a todos ellos. Un deportivo no podrá transportar una tonelada de grava o un camión de cantera correr en la Formula 1. Para cada caso se necesita un vehículo distinto. En el mundo de la seguridad ocurre lo mismo, cada necesidad debe tener una solución concreta, un tipo de sistema de seguridad o alarma adecuado a las características de su entorno.
El auditor de seguridad
Es fundamental a la hora de instalar una alarma saber analizar qué sensores y de qué tipo se deben instalar y dónde se han de poner para que detecten a un ladrón, ya que si no se hace bien se dejan ‘huecos’ y ‘pasillos’ por los que se van a colar, o se dejará a descubierto una puerta o una ventana por la que van a poder entrar. Cuando uno se siente enfermo acude al médico, ya que es el profesional que podrá diagnosticar su enfermedad y recetarle la medicación adecuada para que se cure o cuando el coche empieza a fallar acude al taller mecánico para que diagnostique cual es la avería y repararla. En el caso de la seguridad la persona que realiza esta función es un auditor de seguridad, que acude a su hogar, negocio o empresa y hace un análisis de todo el entorno, de las zonas por las que se podría acceder y los puntos débiles a fin de instalar el tipo alarma y sensor adecuado a cada necesidad. El auditor está formado y tiene la experiencia para realizar el análisis de forma óptima. Esta labor no la puede realizar un técnico instalador ni un administrativo ni un operador telefónico, cada uno de ellos está preparado para cumplir con el trabajo para el que está formado.
Una decisión importante
En definitiva, como en todas las actividades, cuando se tiene una necesidad se debe acudir a un buen profesional en la materia y cuando se trata de la seguridad de su familia o de su empresa ésta es una decisión crucial que se debe tomar teniendo en cuenta no solo el precio del sistema que está adquiriendo sino también la calidad del mismo y del servicio que le ofrece la empresa que ha seleccionado.
Entornos diferentes, soluciones diferentes
Cada entorno: un piso, un chalet, un comercio o una industria son diferentes y tienen diferentes necesidades de protección. Un único modelo de alarma no puede ofrecer la seguridad más adecuada a todos ellos. Un deportivo no podrá transportar una tonelada de grava o un camión de cantera correr en la Formula 1. Para cada caso se necesita un vehículo distinto. En el mundo de la seguridad ocurre lo mismo, cada necesidad debe tener una solución concreta, un tipo de sistema de seguridad o alarma adecuado a las características de su entorno.
El auditor de seguridad
Es fundamental a la hora de instalar una alarma saber analizar qué sensores y de qué tipo se deben instalar y dónde se han de poner para que detecten a un ladrón, ya que si no se hace bien se dejan ‘huecos’ y ‘pasillos’ por los que se van a colar, o se dejará a descubierto una puerta o una ventana por la que van a poder entrar. Cuando uno se siente enfermo acude al médico, ya que es el profesional que podrá diagnosticar su enfermedad y recetarle la medicación adecuada para que se cure o cuando el coche empieza a fallar acude al taller mecánico para que diagnostique cual es la avería y repararla. En el caso de la seguridad la persona que realiza esta función es un auditor de seguridad, que acude a su hogar, negocio o empresa y hace un análisis de todo el entorno, de las zonas por las que se podría acceder y los puntos débiles a fin de instalar el tipo alarma y sensor adecuado a cada necesidad. El auditor está formado y tiene la experiencia para realizar el análisis de forma óptima. Esta labor no la puede realizar un técnico instalador ni un administrativo ni un operador telefónico, cada uno de ellos está preparado para cumplir con el trabajo para el que está formado.
Una decisión importante
En definitiva, como en todas las actividades, cuando se tiene una necesidad se debe acudir a un buen profesional en la materia y cuando se trata de la seguridad de su familia o de su empresa ésta es una decisión crucial que se debe tomar teniendo en cuenta no solo el precio del sistema que está adquiriendo sino también la calidad del mismo y del servicio que le ofrece la empresa que ha seleccionado.
Segurinter
El Sis Doble no corregeix els escrits que rep. La reproducció d'aquest text és literal; fidel a les paraules, redacció , ortografia i sentit de l'autor/s
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